La madrina y la madre de la novia, dos looks impecables y un tono inesperado

Las madres de Santiago Benjumea y Lucía Martín Alcalde nos dan las claves para acertar con y sin mantilla

Por hola.com

Además de la expectación que despierta la novia, hay otra asistente a cualquier enlace en la que se centran todas las miradas: la madrina. Así ocurría también en la boda entre Lucía Martín Alcalde y Santiago Benjumea celebrada esta mañana en la iglesia Espiritu Santo de Madrid y a la que han acudido elegantes invitadas como Inés y Mercedes Domecq, María García de Jaime o la modelo Alejandra Domínguez. Por su parte, la madre del novio, Enriqueta Fernández Govantes, acertaba con su discreta elección en tono verde lima, una propuesta sencilla y atemporal de Inés Martín Alcade, firma familiar en la que también trabaja su nuera, Lucía. 

-Lucía Martín Alcalde, una novia velada con vestido de organza 

El verde también es para las madrinas

Viene siendo habitual en los últimos enlaces que la madrina escoja el fucsia o el rojo para convertirse en una de las invitadas más elegantes. Así lo comprobamos con Myriam Lapique en la boda del 4 de septiembre entre su hijo Carlos Cortina y la abogada Carla Vega-Penichet, o Matilde Solís (madre de Carlos Fitz-James Stuart) quien también se decantó por el rojo para el enlace entre los condes de Osorno,  eligiendo a Lorenzo Caprile como su diseñador de cabecera. En esta ocasión sin embargo, la madre del novio ha confiado en una tonalidad pensada para el entretiempo. El vestido en verde otoñal es una creación a medida de manga larga y cuello barco con una falda larga con estratégica abertura. Además, como el corresponde a la madrina, llevaba una bonita mantilla en tono crudo que complementaba con clutch y stilettos a juego con el vestido.

La madre de la novia, más minimalista 

La madre de Lucía e Inés Martín Alcalde, por su parte, también ha optado por un diseño de sus hijas. El vestido coral con escote asimétrico, manga francesa y falda lápiz midi de la condesa consorte Canillas de los Torneros de Enríquez ha sido otro de los estilismos más destacables de esta boda. Al igual que su hija Inés, daba un toque diferente con la elección de los complementos, en tonos nude -los zapatos- y negro. Un bonito tocado de redecilla, una de las tendencias favoritas de las invitadas en los últimos años que ella ha encontrado en Mimoki, y un clutch oscuro ponían el toque sobrio a un look ideal para invitadas de cualquier edad.