Si hay una compañía femenina con la que David Beckham disfrute más que con la de su mujer, Victoria Beckham, esa es sin duda la de su hija Harper. La pequeña de la familia se ha convertido en el ojito derecho de su padre y de sus tres hermanos mayores, que no pueden evitar que se les "caiga la baba" con ella.
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La mayoría de la veces que hemos visto a Harper ha sido en brazos de su madre, pero en estos últimos días la hemos visto acompañando a su papá. Si con Victoria suele ir de compras, e incluso ha estado en la Semana de la Moda de Nueva York, con su padre, como no podía ser de otra manera, va a ver fútbol. Este fin de semana estuvieron juntos en un parque viendo cómo jugaban sus hermanos y ella no se separó ni un segundo de David. Con su biberón en la mano, estuvo pendiente de las explicaciones de su padre sobre este deporte, que no sabemos si practicará en un futuro y para el que tiene en casa a uno de los mejores profesores.
Ayer volvimos a ver a David con la niña, pero en esta ocasión no hubo fútbol por medio, sino que estuvieron comiendo juntos en un restaurante de Melrose Place, (California). Tranquila e intrigada con lo que el futbolista llevaba dentro de unas bolsas, Harper salió en brazos y descalza del restaurante en el que seguro que disfrutó al máximo de esta cita con su papá. Antes de meterse en el coche, se vio cómo el exjugador del Real Madrid llevaba la camiseta rota por la espalda, no sabemos si por fuerte que agarra su hija a él, o si será una nueva moda.
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