Tiger Woods presume de hija al ganar por tercera vez el Abierto de Estados Unidos

El golfista celebró su victoria junto a su esposa, Elin, y la pequeña Sam Alexis, que acaba de cumplir un año

Por hola.com

Dicen que el triunfo no se disfruta igual si no puede compartirse con los seres queridos. En el caso de Tiger Woods, seguramente no podrá ser más cierto. El golfista estadounidense acaba de conquistar por tercera vez el Abierto de Estados Unidos, 14º Grand Slam de su carrera, y aumenta así su leyenda como uno de los mejores jugadores de golf de la historia, a sólo cuatro victorias de igualar el récord de Jack Nicklaus."Ha sido una gran batalla de la que me siento muy orgulloso, porque no me he rendido en ningún momento", aseguró emocionado tras acabar un maratón de cinco días y 91 hoyos. El número uno del mundo logró imponerse a Rocco Mediate en un desenlace de infarto pese a estar convaleciente de una operación de rodilla, y quiso compartir su éxito con las dos mujeres de su vida: su esposa, Elin Nordegren, y su hija, Sam Alexis.

La pequeña, que este miércoles celebra su primer cumpleaños, se ha convertido desde su nacimiento en el ojito derecho de su famoso papá. Tanto es así, que la esposa del deportista no dudó en llevarla por primera vez al campo para que la niña fuese testigo directo de las hazañas de su padre con el palo de golf. No en vano, el lunes "El Tigre" volvió a demostrar porqué es, desde hace 500 semanas, el jugador número uno del mundo. Tras proclamarse ganador, Woods tomó en brazos a su hija y paseando por el campo presumió de ella más que de cualquier otro trofeo que haya ganado en su carrera profesional. "No habría podido lograrlo si Sam no estuviese ahí... verla crecer, caminar, correr, ha sido simplemente lo mejor del mundo", dijo feliz el jugador.

Vuelve a ser el deportista mejor pagado
No hay duda de que la fortuna no puede sonreír más a Tiger Woods. La estrella del deporte ha vuelto a situarse en el segundo puesto de la lista de celebridades más ricas del planeta que hace pocos días revelaba la revista Forbes. Tan sólo un puesto por detrás de la presentadora de la televisión americana Oprah Winfrey, lo que le convierte un año más en el deportista mejor pagado del mundo con 115 millones de dólares (alrededor de 74 millones de euros) acumulados en 2007.