El riesgo de las pastillas para dormir
Sabemos que los medicamentos son muy útiles cuando son realmente necesarios. Y las benzodiacepinas han resultado ser eficaces para tratar problemas como la ansiedad y, así, evitar el insomnio que se produce cuando nuestro sistema nervioso está alterado. Sin embargo, siempre se deben utilizar bajo prescripción médica y en periodos de tiempo cortos.
Como recuerda César Montiel, las benzodiacepinas pueden crear dependencia. Pero además, su consumo reiterado puede aumentar el riesgo de sufrir alzhéimer.
“La asociación más fuerte observada con las exposiciones prolongadas refuerza la sospecha de una posible asociación directa, incluso cuando el uso de benzodiacepinas podría haber sido un marcador temprano de una condición asociada a un mayor riesgo de demencia”.
Otros efectos secundarios son el deterioro cognitivo y la falta de coordinación motora, que puede dar lugar a, accidentes de tráfico, inestabilidad, caídas y fracturas. Pueden también causar el empeoramiento de algunos estados depresivos, al disminuir de la serotonina y la norepinefrina.
Por ello, antes de tomar estas pastillas, los expertos aconsejan "agotar todas las medidas de higiene del sueño y probar suplementos y remedios naturales que nos puedan ayudar a combatir el insomnio sin medicamentos para dormir".
Estas son algunas de las medidas.