Acaba de abrirse el testamento de la diva italiana

Entrevistamos a Javier Rigau, viudo de Gina Lollobrigida: ‘Fue una víctima’

El empresario arremete contra Andrea Piazzola

Gina Lollobrigida y Javier Rigault

Te quedan x días gratis. Recuerda navegar con tu sesión iniciada.

Te quedan pocas horas gratis. Recuerda navegar con tu sesión iniciada.

Estás en tu periodo de prueba gratuita. Sigue disfrutando de ¡HOLA!+.

HOLA.com, tu revista en internet

Tu período de prueba gratuita en ¡HOLA!+ se ha activado con éxito

Disfruta de todo el contenido totalmente gratis durante 7 días.

Recuerda navegar con tu sesión iniciada.

Ya tienes una suscripción activa.

Recuerda navegar con tu sesión iniciada.

Fue la mujer más bella del mundo. Pan, amor y fantasía para la pantalla. Logró lo que ninguna actriz europea había conseguido hasta el momento: hablar de tú a tú con la industria de Hollywood y ganar un Globo de Oro a la Mejor Actriz cuando su acento era el de La romana! de Moravia. Cantaba, pintaba… era un artista 360, un mito. Una diva con una gracia especial, casi divina. Para mover la cintura, las manos… incluso, para guiñar el ojo. Lo recuerda Javier Rigau, su marido, quien tuvo la suerte, cuenta a ¡HOLA!, de gozar de un último encuentro con Gina Lollobrigida, la leyenda italiana y su mujer, y despedirse de ella en su lecho de muerte. ‘La Lollo’ nos decía adiós hace menos de quince días. Tenía 95 años.

Nunca se recuperó de una caída, una rotura de fémur, que la postró en una cama de hospital en la Ciudad Eterna. Había llegado al centro sanitario en una situación deplorable, denuncia Rigau. La desgraciada metáfora de lo que habían sido sus últimos años.

Acceso a la versión digital

Fue una víctima. Quiere decirlo alto y claro para que cesen ya las especulaciones y los bulos. El empresario cuenta a ¡HOLA! su verdad de las cosas justo ahora que se acaba de abrir el testamento de una mujer que había atesorado una fortuna. La mitad para su hijo Milko, la otra mitad para Andrea Piazzola. Que, ¿a quién pertenece este segundo nombre? Rigau responde. Nos ponemos en contacto con el viudo vía telefónica.

Gina Lollobrigida y Javier Rigault©Hola
Tras la muerte de la artista, el empresario arremete contra Andrea Piazzola, a quien acusa de ‘depredar’ su fortuna.

- Javier, acaba de abrirse el testamento de su mujer y a usted, siendo su marido, no le ha llegado nada.

- Ya me encargué muy bien de que, cuando ella me organizó el matrimonio en cuatro ocasiones, siempre fuera en régimen de separación de bienes. Mi abogado, Michele Gentiloni, me dijo que depositara un estudio por un perito tasador del importe de mi patrimonio y, evidentemente, cuando llegamos ya a una cantidad que cuadriplicaba el de ella, ya paramos… Así que, no entro en este asunto para nada. Ni como legitimario y, ni mucho menos, como legatario, pero ese testamento no es obra de Gina. Siempre he defendido a Gina y siempre la defenderé porque no tiene ninguna culpa. Ni de lo que ha dicho ni de lo que ha hecho.

- Pero, disculpe, no sabía que se hubiera conseguido esa incapacitación. Creía haber leído que fue desestimada...

- Sí sí. Es que se están diciendo tantas cosas... Lo consiguió el bufete de abogados civilista Acampora con una sentencia firme. Lo que ocurre es que estas confusiones vienen muy bien... Gina Lollobrigida fue incapacitada judicialmente por su estado mental. Lo recurrió en primer grado la contraparte… Fracasó. En segundo grado, fue nuevamente ratificada la incapacitación y, finalmente, en 2020, otra vez, por casación. Porque esta mujer no pensaba por sí misma. Ella pensaba, hablaba y actuaba por boca de Andrea Piazzola que era quien le obligaba a hacer.

- Porque él ejercía de asistente personal, entiendo…

- Estoy harto de que se diga que este hombre era su manager o su personal assistant… Él mismo ha dado testimonio de a qué se dedicaba ante el juez, en el juzgado. Allí, le preguntaron: “Usted, ¿qué estudios tiene?”. “Yo empecé un curso de mecánica y nunca lo acabé”, dijo. Punto. Y nada más.

Gina Lollobrigida y Javier Rigault©Hola

- Sin embargo, Gina ha confiado siempre en él y, en cambio, no se hablaba con su familia y con usted tuvo un pleito...

- Porque se me propuso, que yo testimoniar en contra del hijo de Gina, de Milko. Que dijera que yo había sido testigo de cómo él insultaba gravemente a la madre y de cómo la pegaba. Yo me negué. Esto le que le estoy contando sucedió en vísperas de Navidad de 2012 y en enero de 2013 es cuando me notifican que me había esposado con Gina “alla sua insaputa”, es decir, que me había casado con ella sin que ella lo supiera. Esto nunca se ha publicado.

- Entiendo entonces que esa denuncia sobre su matrimonio fue en represalia, ¿no?

- Claro, porque Gina luchaba más por mí que por su propio hijo o su nieto. La prueba es que a ellos los desahuciaron en 2011 y en 2013 solamente quedaba yo con ella. Los demás habían sido todos apartados. Por eso, cuando me propusieron ese ataque al hijo de Gina, cuando tuvieron el atrevimiento de decirme que les hiciera “el favor” de testimoniar en falso delante de un juez, fue cuando yo me giré y dije. “Oiga, yo lo único que puedo testimoniar ante un juez es 1) nunca he visto insultar al hijo a su madre y nunca he visto pegarla 2) si esto hubiera pasado, le aseguro que mi mujer me hubiera llamado y me lo hubiera dicho y 3) lo único que yo puedo declarar ante un juez es que tengo la seguridad de que eso nunca ha sucedido”. Se marcharon y yo le dije a Gina: “esto, si sigue así, yo me divorcio”, aunque yo no lo iba a hacer… Entonces, ella, que cuando se ponía rabiosísima, siempre levantaba un dedo, me dijo: “Javier, tú me has plantado ya una vez en la Iglesia en el altar, delante de todos el mundo. Tú, dos veces, no me vas a plantar”. Pero, le giraron el cerebro… Que si Javier es un traidor, que si no te quiere… Y, al cabo de pocas semanas, fue cuando me notificaron que estaba denunciado por Gina por casarme sin su conocimiento. ¡Tres años después de casados! Y cuando ella había organizado publicamente el matrimonio conmigo... En 2001 en Mónaco, en 2007 en Nueva York y, después, en Roma. Y el matrimonio se hizo. Por poderes. Perfectamente organizado por ella además. Viniendo ella con su abogada a Barcelona; firmando todo los requerimientos y todos los papeles a un notario; habiendo rellenado todos los papeles en el Arzobispado de Barcelona… Pero así ha sido todo… Nos hemos visto machacados falsamente. El hijo, el nieto y yo.

(FILE) Javier Rigau, Gina Lollobrigida's Alleged Fake Husband©GettyImages
En esta imagen de archiva, Gina Lollobrigida y Javier Rigau, que mantenían una relación sentimental. La difrencia de edad era de 34 años.

- Pero, al final, le permitieron verla antes de morir, ¿verdad?

- Cuando ella fue ingresada, inmediatamente, me llama su hijo. Que su madre estaba muy mal. En unas condiciones físicas terribles. Yo he estado luchando desde septiembre, desde que se rompió el fémur, para que tuviera lo mejor. Pagando de mi bolsillo enfermeras para que estuvieran con ella, pero no me fue posible. Y tengo todos los documentos probatorios enviados a mis abogados, mis requerimientos de “sostegno” (manutención) y, cuando la ingresaron, Gina tenía un estado deplorable. Cuando entré en la habitación, me tuve que poner en los pies de la cama porque ella no se movía. Pero aún así, ella me sonrió. Fue indescriptible. Movió un poco la mano y yo se la cogí… Es que mi relación con Gina fue de muchos años. Desde muy joven… Yo siempre le pedía, porque me hacía mucha gracia, que me guiñara el ojo, como en la película Come september, que lo hacía muy bonito… Le decía, “guiñame el ojo”, “fammi un occhietto”, y ella me lo hacía. Y como se lo pedía a cada rato, me decía: “me vas a dejar tuerta”... Pues bien, sin decirle nada, se despidió de mí guiñándome un ojo. Para mí, ese fue su adiós… De Milko también se despidió. Su hijo es un trozo de pan. Es una buenísima persona… Cuánto se lamenta de que, durante diez años, su madre haya sido secuestrada, robada…

- Ahora, Milko tendrá que solicitar la parte de herencia que le corresponde, ¿no?

- Sí, a ver qué recibe de lo que queda porque lo que ha desaparecido debe ser prácticamente todo.

- ¿Me está diciendo que la fortuna de Gina ha desaparecido?

- ¿Le hago una enumeración cronológica? Primero, las joyas subastadas en Sothebys cuyo importe apareció en una cuenta en las Islas Caimán. Después, la venta de tres pisos bien situados en la zona de Piazza di Spagna en Roma en 2015 y, en 2018, otro apartamento en Mónaco. ¿Le parece poco? Se calcula que doce millones de euros… No es algo que me perjudique personalmente, pero me sabe muy mal por el hijo de Gina porque, su madre, de toda la vida, antes de ser anulada mentalmente, siempre dijo como es lógico que todo su patrimonio iría a su hijo.

(FILE) Javier Rigau, Gina Lollobrigida's Alleged Fake Husband©GettyImages

- Veo que su relación con Milko y Dimitri es buena.

- La relación de Milko con Javier Rigau y de Dimitri, el nieto, con Javier Rigau siempre ha sido óptima. Desde el principio. Siempre bien avenidos. Ya estoy harto de que se digan otras cosas. Prueba de ello es que estuvimos los tres juntos durante la Capilla Ardiente y el Funeral de Gina. Y también en el entierro. Un entierro al que no fue nadie, excepto nosotros tres. Cuando fuimos al pueblo de Gina, a Subiaco, se lo digo claramente, como ya no había cámaras ni medios, nadie estaba interesado en hacer comedia. Solo la acompañamos quienes la quisimos de verdad.

- Qué historia más triste…

- Pero son cosas que no solamente le pasan a una estrella de cine internacional. Desgraciadamente, situaciones así ocurren en casa mucho más modestas…