Juanita es una hermana que siente mucho amor por su hermano y trata obviamente de protegerlo y de cuidarlo. Yo creo que todos conocemos una ‘Juanita’. Creo que es un personaje que, aunque se grabó en República Domincana, va a conectar todas las nacionalidades, ¡todos tenemos esa prima o ese hermano que vive fuera! Todos conocemos a una mamá metiche o una tía, a los vecinos que se enamoran... es mucha comedia, es comedia pura y está bien. Después de estar encerrados en una pandemia por tanto tiempo, tenemos que reírnos. ‘Líos de Familia’ en su segunda temporada es una gran opción.

Estoy trabajando con grandes comediantes de mi tierra como Miguel Céspedes, Raymond Pozo, Cheddy García y yo pensaba, como yo crecí viéndolos hacer comedia, yo pensaba ‘esta gente va a estar un poquito más seria, centrada en su asunto’. Pero cuando llegué, fue como ‘¡muchacha, Francisca!’, me hablaron como si nos conciéramos de toda la vida. Para mí fue una gran lección de humildad y me ayudó a calmar los nervios y eso ayudó a que el personaje de Juanita quedara de la manera que quedó.

No me gusta mucho como hablar así de lo que va a pasar porque de verdad no sé, no tengo control, y Dios, con las experiencias de vida que he tenido, como que él se ríe de tus planes porque él tiene otros planes para ti. Como siempre, me manejo por mi fe, yo fluyó con lo que venga. Yo amo la actuación, yo también amo estar en ‘Despierta América’ pero ya Dios sabrá en qué lugar me va a poner. Yo disfruto mucho estar en ese show todas las mañanas y servirle a la comunidad y también tengo esta pasión por la actuación y tengo la bendición de que una cosa me permite la otra.

Sí, sobre todo cuando uno es mamá primeriza, la culpa es el primer sentimiento que te llega, después del amor a tu hijo. Yo quiero seguir cumpliendo sueños, pero también quiero ser una excelente mamá. Hago lo que puedo, me apoyo en mi esposo, que de verdad me ayuda mucho para que yo siga cumpliendo sueños.

También doy mi 100% en lo que estoy haciendo; cuando estoy de 7 a 11 de la mañana en ‘Despierta América’ me entregó al 100% y cuando salgo de ahí y estoy con mi hijo, estoy 100% siendo mamá y presente. Yo creo que con los hijos he aprendido, que no es tanto el tiempo sino la calidad, porque a veces puedes estar con ellos en la casa, pero no darles esa calidad. Nunca voy a encontrar el balance perfecto, lo sé porque la perfección no existe, pero pues vivo un día a la vez, voy aprendiendo.

Bueno sí, precisamente ahora andamos buscándole escuela porque Gennaro es súper pilas. Yo le digo a mi esposo, ‘tenemos que sacarlo de la casa, tenemos que ponerlo a que vaya a la escuela, que socialice, que haga otras cosas’. Yo lo que quiero es que mi hijo sea feliz y haga las cosas que él quiera hacer, no porque yo se lo exija. Esa es una de mis metas. Mientras tanto, yo estoy como ‘educándolo’ en el sentido de que mi hijo tiene un año y habla muchísimo. Yo soy la profesora Francisca cuando salgo de trabajar.

Él (Francesco) solo le habla en italiano y yo solo le hablo español, y como Francesco y yo nos hablamos en inglés, él también agarra un poquito. Ahora yo veo que entiende perfecto y es increíble lo que los bebés pueden hacer, es que su papá le habla italiano y él entiende todo en italiano, y yo le hablo en español y lo entiende todo, pero cuando habla, él lo hace en español. La meta es que pueda hablar los tres idiomas a la perfección.

Primero, no está 100% comprobado que él le fue infiel. Según dicen, ellos estaban separados hace un tiempo y ella quería como regresar la relación por el bien de sus hijos, como hace toda madre. Que se esté portando mal, tal vez enseñando como una nueva novia tan rápido, no lo veo con tan buen ojo como la mayoría, pero al final de cuentas, la gente hace lo que los hace felices y estoy segura que aunque es un momento difícil para ella, en algún momento llegará esa oportunidad que la hará sonreír otra vez. Por ahora, me gusta mucho verla enfocada en sus hijos, verla con ellos y de verdad, orando y empatizando mucho con ella para que este difícil momento pase.