Lola Ponce expande su amor a través de su homenaje a Armando Manzanero

Nace en realidad hace ocho años, cuando le comento a mi esposo, a mi amor, Aarón (Díaz), que uno de mis grandes sueños era cantar con Armando Manzanero; entonces él me dice: ‘Conozco perfecto a su hijo, Juan Pablo Manzanero, le voy a llamar para ver qué opina’. Entonces Juan Pablo ve mi carrera en Argentina e Italia (y me dice): ‘Le voy a mandar todo a mi jefe, y vamos a ver qué él dice’.

Corte a, Armando dice: ‘Por favor tráiganla, que venga a cantar conmigo al SACM de la Ciudad de México. Llegué yo con una carpeta llena de canciones, porque escuchaba su música desde pequeñita, los Long Play en mi casa. Mis padres crecieron con su música, con Aretha Franklin, con la de Frank Sinatra, grandes artistas, grandes voces. Estuvimos dos horas sin parar de cantar, todas sus canciones y me dice: ‘Por favor, tenemos que grabar live session. Entonces grabamos cuatro de las canciones que están en este EP, que son versiones completamente en vivo, piano y voz con él a dueto.

Y bueno, la última (canción), la que viene a coronar ese sueño, esa realidad, es Somos Novios. Armando hereda estas voces a su hijo y él me las da a mí. Juan Pablo Manzanero es el productor de este álbum y me dijo: ‘Lola, tenemos que hacer la nueva versión de Somos Novios’. Grabamos con la orquesta filarmónica con la que él siempre ha trabajado, con sus ingenieros de audio y sale esta nueva versión para las nuevas generaciones.

Ese arreglo, es un arreglo que respeta el origen… Ese origen, que no nos olvidemos, es el que lleva a que las grandes voces como Elvis Presley, Frank Sinatra, Perry Como, Andrea Boccelli, la ha cantado todo el mundo, pero tuve la oportunidad de reversionarla, desde lo original.

Las seleccionamos juntos con Armando, Juan Pablo y con Aarón. Las versiones son completamente en vivo como se cantaron… Ahí no hay arreglos, es lo que es, como ir a un concierto o meterte a un lugar en New York a escuchar jazz. Esas cuatro canciones son la esencia de lo que fue ese momento.

Me gusta que en estas épocas reivindiquemos nuestra humanidad, nuestra naturaleza, nuestra fuerza interior, quien realmente somos. No es la Inteligencia Artificial el punto que uno tiene que mirar. Nosotros somos la obra de arte más sofisticada y extraordinariamente perfecta, los seres humanos. Entonces expongamos ese amor, expandámoslo lo más que se pueda.

El legado del maestro es eterno, nada lo va a parar ni cancelar. Son las canciones de amor más hermosas que existen, realmente. Hay muchas canciones de amor increíbles, pero las de él tienen una elegancia, una misticidad y una magia única, que es milenaria, además.

El fluir es lo mejor, a mi me gusta que mí música hablé por sí sola… Quiero invitar a las nuevas generaciones a que se enamoren, hasta que puedan bailar estas canciones, vivirlas, creo que es importante.

Cuando estoy contigo es una canción que me liga mucho a mi historia con Aarón... nos recuerda particularmente, esta parte de la letra: ‘Cuando estoy contigo no existen fracasos, todo cuanto quiero lo encuentro en mis brazos’, el poder de las palabras, de vivir en el presente. Es una invitación también a decir: ‘Tienes algo tan valioso, se grato con eso, admíralo, cuídalo, protégelo’, porque a veces nos dicen de hacer todo el resto y es completamente equivocado.

Necesitamos respirar más amor, necesitamos poder creer, necesitamos respirar ilusión… Realmente la posibilidad de que podemos ser felices, de que podemos encontrar a nuestro gran amor.

¿Sabes qué es lo que pensaba antes de encontrar a Aarón? Yo creía en ese amor que después se materializó en él. O sea, el amor puro tiene que existir, yo lo voy a encontrar… Tuve que cruzar todos los océanos, a veces nos reímos, y yo le cuento: ‘¿Entiendes que tuve que cruzar de Argentina a Italia; de Italia a Estados Unidos’… Es una hermosura habernos encontrarnos realmente, porque cuando tú lo piensas así, a veces a amigas que aún no han encontrado su amor les digo: ‘Cómo es tu hombre, ya existe, tienes que imaginarlo’, porque así, cuando llega, tú sabes que es él.

Estoy en el momento de fluir, estoy en el momento del amor puro y extremo, sin límites… Para mí el amor es nuestro gran motor. Es el motor que hace que las cosas que somos sucedan, es el motor que nos pueda regalar esa felicidad, el amor es lo que nos cura todo el tiempo de las cosas que nos van pasando en la vida, porque no es que todo sea perfecto, pasan cosas todo el tiempo, pero la respuesta a todo es el amor, es lo que nos ayuda a seguir evolucionando.

El amor propio es fundamental, porque sí tú tienes bien ese amor, todo alrededor va a estar bien. Si ese amor algo falta por resolver, lo mismo va a ser lo que atraes, entonces gracias a Dios estoy en un momento de plenitud, realmente haciendo mis sueños realidad.

Hay una canción particular que se llama Todavía, me encanta porque me recuerda que siempre existe un todavía, nos recuerda que nunca es tarde para nada, excepto que nos tengamos que ir de este mundo. Entonces todavía si tu puedes, vas, dale, no hay nada, solo Dios puede pararte, dale, porque somos los constructores de nuestra propia realidad.

Todavía lo tengo, hay que darle, es el presente y el presente es el eco del futuro, entonces yo vivo al día… Nuestra vida es un hermoso libro, cada nuevo día es una nueva página.

Yo siempre he soñado tener una carrera que me lleve por el mundo y de repente me encuentro trabajando un mes y medio, dos meses, en Italia, me toca un mes en Argentina, nos vamos con Aaron a Estados Unidos, que él esta con su carrera como productor también; somos artistas independientes, productores, producimos nuestras propias ideas.

Es fantástica, no te puedo explicar lo que nos enseñan esas niñas. Nosotros somos muy adaptables, amamos eso, creo que nuestras carreras nos han enseñado eso, pero verlo a través de ellas, ver cómo lo disfrutan. Imagínate, tener 11 y 10 años y ser trilingüe sin ninguna fatiga. Y que aman llegar a un país con diferente cultura y como si nada, y amando y respetando al prójimo. Y las niñas realmente lo disfrutan.

La primera va a ser en Argentina, el 9 de marzo, vamos a estar presentándolo con una orquesta sinfónica en el Chateau d’Ancón, que es un chateau precioso en Mendoza, al pie de la Cordillera de los Andes, va a ser un evento realmente hermoso, donde se va a unir el cierre de la Vendimia.

Voy a llevar México, a mi hombre mexicano, a mi país, llevar este tesoro (la obra de Manzanero) de nuevo a la Argentina, que él es tan amado (don Armando), de verdad va a ser muy especial.

Estamos viajando por todo el mundo, vivimos en cuatro países. Estamos basados en Estados Unidos, pasamos tiempo por mi trabajo en Italia, pasamos tiempo en México también por el trabajo de Aaron, pasamos tiempo en Argentina.

Ahora también tenemos este proyecto precioso con Chateau d’Ancón, Aaron ya tiene su propio equipo de Polo, yo lo llamo polo ranch… Es algo increíble, porque Aaron llegó ahí simplemente a cabalgar entre los viñedos y en Argentina dijeron: ‘Este hombre tiene que jugar polo’, por la forma en la que cabalga. Todo eso se está realizando, es algo que él en sus sueños tenía, y es eso, soñar con potencia por las cosas, cuando son buenas, cuando es un buen propósito, que en este caso es expandir el amor, el arte, la cultura, unir los países.