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¿Adivinas? Este bebé hoy es un caso de éxito en Harvard
Y una reconocida empresaria que protagoniza las mejores portadas de moda y cuenta con una fortuna personal estimada en 10 millones de euros
Cuando Harvard la estudió por primera vez no sumaba, todavía, 11 millones de seguidores en su cuenta de Instagram pero, en apenas unos años, había conseguido una fortuna valorada en más de 6 millones de euros. Tenía también una compañía propia que empleaba a 16 personas menores de 30 años y había logrado la residencia estadounidense. Motivos más que suficientes que la han llevado, en más de una ocasión, a formar parte de la lista de los 30 creativos menores de 30 años con más éxito de Forbes. Ahora supera la treintena, espera a su primer hijo y es la portada de diciembre con la que H!FASHION cierra doce números de éxito en 2017.
Chiara Ferragni abrió en 2012 The blonde salad, el blog de moda que la haría famosa y en el que colgaba fotos de sus estilismos. Pero ese fenómeno egoblogger con el que se dio a conocer había empezado, en realidad, mucho antes. En 2009 la italiana ya colgaba sus retratos en Flicker, había hecho de MySpace un lugar recurrente en el que subir contenido y ya disponía de su propia línea de zapatos. Muchos apuntan a que su éxito radica en haber sido la primera en este mundillo pero, según los estudios de Harvard, en el caso Chiara hay algo más: una visión de futuro y de negocio.
Cuando Chiara y su novio de entonces, Riccardo Pozzoli (ahora CEO de la empresa), decidieron monetizar el blog, empezaron ofreciendo a algunas marcas imágenes de Chiara como modelo. Se le daba bien, tenía “rollo” y una imagen fresca. Era perfecta para la revolución digital. El siguiente paso fue consolidar y aumentar el número de seguidores. Un trabajo que implicó mejorar la calidad de las fotos y, como cabría de esperar, la cantidad. Decidieron convertir el blog en una especie de revista de estilo de vida, un cambio que tuvo muy buena acogida entre su audiencia.
Las marcas con las que empezó a colaborar también sufrieron cambios. Si en un primer momento la bloguera adaptaba su estilo a las firmas que la reclamaban, descubrió que era mejor hacerlo solo con aquellas con las que tenía algo en común. El resultado fue una imagen mucho más coherente, llena de firmas de renombre, que la posicionó dentro del sector del lujo. Hoy las imágenes que Chiara sube a su cuenta de Instagram obtienen, de media, más de 200 mil likes, su fortuna ha ascendido hasta los 10 millones de euros, protagoniza las portadas de las principales cabeceras de moda y, además de tener su propia línea de complementos, diseña colecciones cápsula para otras firmas como Superga o Imtimissimi. Se ha convertido es un verdadero caso de éxito. Normal que Harvard la tenga en cuenta sin haber sido alumna de su Universidad.
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