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Durante la 76ª edición del exclusivo Baile de la Cruz Roja, celebrado este fin de semana en la Salle des Étoiles del Sporting Monte-Carlo y presidido por la princesa Charlène y el príncipe Alberto de Mónaco, pudimos ver maravillosos looks de invitadas que no pasaron desapercibidos. Pero lo que no imaginábamos es que Alexandra Saint Mleux se convertiría en nuestra favorita. La novia del conocido piloto de Fórmula 1, Charles Leclerc, se inspiró en uno de los vestidos más recordados de la historia del cine, popularizado por la actriz y princesa Grace Kelly.
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Consolidada como uno de los rostros más influyentes dentro y fuera del circuito, este debut de gala demuestra su pasión por la moda y, en concreto, por las películas de época. Posando en el balcón de una elegante suite del Hôtel Hermitage Monte-Carlo, la amante del arte y modelo con más de 2 millones de seguidores en redes, lució un impresionante diseño de gasa azul que sigue el elegante estilo de los años 50.
Ella misma confesó a través de Instagram que su elección es un claro homenaje al icónico look de la película Atrapa a un ladrón (1955), dirigida por Alfred Hitchcock, protagonizada por Grace Kelly y rodada precisamente en este rincón de la Costa Azul. Uno de los grandes clásicos del cine, cuyo vestido azul pastel de chifón azul, creado por Edith Head —una de las grandes figuras del diseño de vestuario en Hollywood—, ha sido fuente de inspiración desde su primera aparición en pantalla.
Con cuerpo encorsetado y drapeado en disposición diagonal, finísimos tirantes al tono, una pequeña flor de gasa, falda plisada y fluida, una delicada capa sobre los hombros… Sin duda, Alexandra se ha reencarnado en Grace. ¿Es el diseño original o una recreación cuidada al detalle?
En este caso, la protagonista, que ha demostrado su amor por los clásicos del cine y por armarios dignos de divas como Kelly, lo ha recreado con la ayuda del diseñador francés Antoine Guerin, especializado en Alta Costura tras haberse formado en casas como Schiaparelli, Dior, Mugler y Jean Paul Gaultier. Él mismo ya la ha vestido en otras ocasiones con propuestas personalizadas.
Con este homenaje tan sofisticado, queda claro que todo lo que triunfó en el pasado, aunque hayan trascurrido más de 70 años, ¡nunca pasa de moda! Alexandra completó el look de impacto con un moño pulido estilo bailarina, maquillaje bronceado, joyas discretas con diamantes y sandalias negras de tiras, ¡estaba impecable!