Paso 1. Pintar la pared
Pintar las paredes de tu casa es, posiblemente, uno de los trabajos más sencillos que se pueden realizar, por lo que no debes tener miedo si nunca antes lo has hecho.
Comienza por tapar todo lo que no quieres que se manche: marcos de puertas y ventanas, rodapiés, enchufes, interruptores, y también el suelo. Utiliza cinta de pintor y plástico.
A la hora de elegir la pintura, aunque puedes optar por el color que más te guste, el resultado será más impresionante si te decides por un color intenso y especial, como el morado que se ha empleado en este caso.
Un consejo: para lograr el mejor resultado y evitar las marcas del rodillo la pintura no debe estar muy espesa. Si es así, añade un poco de agua para diluirla ligeramente.
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