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Desde que el teletrabajo irrumpió en nuestras vidas el pasado 2020 de forma un tanto inesperada, se hace necesario descubrir cuáles son los requisitos indispensables para crear el mejor espacio de oficina en casa, aunque no dispongamos de muchos metros cuadrados. Y lo cierto es que se pueden conseguir resultados sorprendentes incluso si vives en una minicasa. Aquí tienes algunas ideas para inspirarte.

 

Pequeña pero práctica

Así debe ser tu nueva oficina en casa, si el espacio es escaso. Piensa que cualquier rincón puede convertirse en el emplazamiento perfecto para tu nuevo puesto de trabajo. No necesitas una habitación específica para ese uso, sino crear una zona pequeña tranquila, cómoda y con suficiente luz natural, preferiblemente.

En caso de tener que utilizar muchas cosas en tu día a día laboral (papeles, cuadernos, archivadores, etc.) busca una solución práctica de almacenaje. Puede ser un estante en la pared o un carrito multiusos que después podrás retirar.

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De pared a pared

Aprovechar un hueco entre dos paredes puede ser una idea fantástica para montar una minioficina. Aunque los expertos en ergonomía señalan que 80 cm de ancho es la medida mínima que ha de tener la mesa de trabajo, si está entre dos tabiques debe tener al menos 1 metro.

Pinta las paredes de blanco (o de un tono claro y luminoso) e instala una balda de madera gruesa que haga las veces de mesa de trabajo. Otra idea es utilizar un escritorio de pared como el de la imagen. Es de Ikea y lleva dos cajones que te vendrán de perlas.

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¿Por qué no en el dormitorio?

Tu nuevo puesto de trabajo no tiene por qué estar en el salón de tu casa. El dormitorio, si cuenta con un rinconcito que puedas utilizar, puede ser una estupenda alternativa.

¿Una de sus ventajas? La tranquilidad. Al tratarse de una zona de descanso, íntima y reservada, podrás concentrarte mejor que en otras zonas de estar de la casa.

Coloca una pequeña mesa frente a la ventana para aprovechar la luz del día y ponte a la tarea. Verás cómo ganas en productividad.

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En el salón, detrás del sofá

Puede que no te parezca el mejor lugar de la casa para concentrarse en el trabajo, pero todo depende de tus necesidades: de tu familia, de las horas en las que se desarrolla tu jornada, etc.

En algunas ocasiones puede ser una buena idea, que te permite aprovechar al máximo la que puede ser la estancia más amplia de tu casa. Coloca el sofá en el medio del salón, más o menos, y sitúa la mesa de trabajo detrás, a la espalda.

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Dentro de un armario

En el espacio que se necesita para montar un armario individual puedes crear tu propia oficina en casa. Y la imagen es la muestra de que es posible. Abre las puertas, haz una buena limpieza del interior del armario y ponte manos a la obra.

Necesitarás una mesa del ancho adecuado, y un panel para colgar tus cosas. Los paneles perforados se convierten en una gran solución.

 

Un consejo

Es importante que instales una toma de corriente eléctrica, ya que necesitarás conectar los cargadores del portátil o del móvil, y enchufar una lámpara de mesa, por ejemplo.

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Cuélgalo en la pared

A este escritorio no le falta detalle: tiene zona de almacenaje, es decorativo y ocupa un espacio mínimo. Si te gusta el bricolaje y trabajar con madera, puedes construirlo tú misma siguiendo las explicaciones que te ofrecemos aquí. Es una buena idea para contar con una minioficina en casa muy práctica.

 

Un consejo

A la hora de colgar el escritorio de pared debes tener en cuenta la altura a la que ha de quedar la mesa. Para trabajar cómodamente y sin problemas posturales ha de estar a una altura de entre 73 y 76 cm. desde el suelo.

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Debajo de la escalera

Hay muchísimas formas de aprovechar el hueco que queda debajo de una escalera: hacer un armario, crear un rincón de lectura o montar una pequeña oficina para teletrabajar. No necesitarás más que una mesa pequeña, una silla de escritorio adecuada y, si el espacio te lo permite, una estantería para libros y otros materiales.

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Un escritorio extensible

Es el mueble perfecto para teletrabajar en casas pequeñas. Como el de la imagen, que apenas ocupa un poco más que cualquier consola. Sin embargo, la mesa inferior se extiende ofreciendo más espacio de uso.

Así, cuando tu jornada termina, el escritorio se recoge y no molesta. Cuenta, además, con dos cajones para guardar tus cosas sin tenerlas a la vista.

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Un mueble compacto

Es pequeño, funcional y la mejor idea para aprovechar una esquina del dormitorio, por ejemplo, para crear tu rincón de oficina.

Un mueble que te ofrece todo lo que necesitas para concentrarte y trabajar al máximo rendimiento. Acompáñalo de una silla de escritorio ergonómica, que te permita trabajar durante toda la jornada sin dolores de espalda. Hay muchos modelos que, además, son decorativos.

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