Roman Polanski se encuentra ‘débil’ y sufre ‘depresiones’ en una cárcel de Suiza

Por hola.com

El cineasta francés de origen polaco Roman Polanski, encarcelado en Zúrich en virtud de la orden de busca y captura internacional por abusar sexualmente de una menor en 1977, se encuentra "abatido" y "debilitado por un pequeño problema de salud", manifestó su abogado en diversas entrevistas. Se cumplen algo más de quince días desde el arresto del realizador, de 76 años, cuando se dirigía al Festival de Cine de Zúrich para recibir un homenaje por su trayectoria cinematográfica. “Le encuentro muy cansado y deprimido y su estado, desde un punto de vista tanto físico y psíquico, me preocupó. Me pareció que estaba muy afectada su estabilidad mental”, asegura su abogado, Hervé Temine.

Su abogado ha vuelto a solicitar la puesta en libertad de su cliente y asegura que Polanski "jura por su honor" no abandonar el territorio suizo, y está dispuesto a comprometer como garantía medios financieros y bienes, además de presentarse dos veces al día en comisaría. Sin embargo, las autoridades suizas rechazaron anteriormente esta petición por entender que existe un alto riesgo de fuga. Hervé Temine señala que lo más importante en el caso ahora es "darse cuenta de las consideraciones humanas", tanto de Polanski como de la demandante, Samantha Geimer, - en 2008 admitió que su supuesto agresor no era un peligro para la sociedad y solicitaba que se archivara la causa-, y "buscar una solución" al asunto.

Polanski, que entonces tenía 43 años y ya era un director de renombre tras su éxito con La semilla del diablo y Chinatown, admitió haber drogado y abusado de una menor de 13 años, Samantha Geimer, en casa de Jack Nicholson. Tras pasar 42 días bajo examen psiquiátrico en una prisión de Los Ángeles, y después de admitir su culpabilidad, abandonó el país antes de que concluyera el caso porque temía que un juez lo condenara a 50 años de prisión, a pesar de que había alcanzado un acuerdo para ser puesto en libertad. Nunca más volvió a pisar Estados Unidos, ni siquiera para recoger el Oscar al mejor director que le fue concedido por El pianista, un premio que recogió Harrison Ford.