2. Toma proteína vegetal
Hay vida más allá de la proteína animal... y descubrirla puede ser incluso divertido. Legumbres, quinoa, tofú o seitán son algunas opciones con las que puedes equilibrar tu consumo de carne y pescado. "Si vas a cenar pescado, en vez de comer carne puedes preparar una ensalada de garbanzos, con espinaca, queso feta, tomate seco, cebolla morada, aguacate y aderezo de limón, aceite de oliva y vinagre de manzana o balsámico", aconseja Beatriz Larrea.