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La Semana de la Moda de Madrid arrancaba su 72 edición la pasada jornada y eran muchos los rostros conocidos que se acercaban a IFEMA para dar su apoyo a la gran cita con la industria, en un año especialmente delicado. Uno de los desfiles más esperados del arranque fue el de Ágatha Ruiz de la Prada, incondicional de la Fashion Week Madrid, que puso su habitual nota de color y creatividad a una entrega empañada por la pandemia. Luis Gasset, su nueva pareja, estuvo a su lado en la presentación de la nueva colección, además de amigos como Boris Izaguirre, Cristina Pedroche o Eugenia Martínez de Irujo, que acudió acompañada de su marido, Narcis Rebollo. "El color da vida", aseguraba la duquesa de Montoro a los micrófonos de Gtres tras disfrutar del show, momento que aprovecharon los medios gráficos para interesarse por algunas cuestiones relativas a su familia. Y ella daba una inesperada respuesta: "De mi familia no tengo ni idea ya".
Sobre la reciente noticia de la paternidad de su sobrino Fernando Fitz-James Stuart, Eugenia ha comentado escuetamente: "Todo muy bien, están muy contentos", sin querer extenderse demasiado. Como tampoco quiso hacerlo ante la pregunta sobre el compromiso de Carlos Fitz-James y Belén Corsini, que esta semana se recoge en las páginas de ¡HOLA!. Y, ante la pregunta directa sobre si se sabe la fecha del enlace, ha zanjado: "No sé nada más. De mi familia no tengo ni idea ya".
Su hermano Cayetano Martínez de Irujo vendía recientemente su parte de la marca de productos gourmet La Casa de Alba al primogénito de la familia, Carlos. Una operación que, según Informalia, habría supuesto una transacción económica de 300.000 euros y que implica hacerse cargo de una deuda de un millón que arrastraba el sello gastronómico. Sobre este asunto tampoco ha querido pronunciarse la Duquesa de Montoro. "Yo quiero ser feliz, no me preguntéis cosas desagradables", ha sentenciado.
Dedicada a la pintura durante el confinamiento
Lo que sí ha compartido Eugenia son sus nuevos proyectos: "Hago ahora una exposición benéfica y tengo mucha ilusión, porque estuve pintando muchísimo en el confinamiento y lo voy a hacer para una fundación para niños con problemas". Es una afición que ha heredado de su madre y precisamente a ella le rendía un bonito homenaje hace unos meses, pintando su versión de un cuadro que la fallecida Duquesa de Alba le regaló y que había dibujado con tan solo 13 años. A los lienzos, los animales –su "gran pasión", como confesaba en su última publicación en las redes- y su familia se ha dedicado este verano, en el que ha disfrutado de unos días en el sur junto a su marido y su hija Tana Rivera.
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