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Lara Álvarez no para. Es una de las chicas de moda de la televisión en España y posee una de las agendas profesionales más apretadas. Después de su aventura en Honduras como presentadora de Supervivientes, en la actualidad es la encargada de conducir el Última hora de los miércoles de Gran Hermano VIP, el popular 'reality' emitido por Telecinco. Pero, además, la asturiana compagina su faceta televisiva con la de directora creativa de su propia firma de moda, BluePalm, un proyecto muy especial para ella que arrancó hace poco más de un año. Una chica todoterreno que se mantiene ocupada la mayor parte del tiempo, de modo que recientemente ha decidido hacer un paréntesis para viajar en solitario a su tierra y desconectar de la rutina.
Una breve escapada 'detox' a varios niveles de la que ha querido presumir a través de sus redes sociales, para envidia de su más de un millón de seguidores. Alojada en un hotel termal, se ha sometido a varios tratamientos reparadores que, según sus propias palabras, la han dejado como nueva.
"Visita fugaz, pero sanadora... gracias a todos los profesionales de @lascaldas que, en tiempo récord, me habéis hecho una puesta a punto... Vine sin poder girar el cuello y con la espalda agarrotada. Salgo nueva. Prometo sacar tiempo y vivir esta experiencia como se merece... Hasta pronto", escribía junto a una imagen en su cuenta de Instagram en la que aparece con gesto relajado y ataviada con un albornoz y una toalla en la cabeza.
Pero Lara también ha tenido tiempo de salir al exterior para conectar con la naturaleza. Asturias es todo un paraíso natural por lo que no ha querido dejar pasar la oportunidad de salir a pasear por la montaña y perderse en sus verdes parajes. Así, compartía otra idílica imagen con sus 'followers' en la que se la puede ver sentada frente a un lago en pleno bosque. Sin duda, una estampa que contrasta mucho con las de los paisajes tropicales que mostraba durante su estancia en las islas de Cayos Cochinos.
Sin embargo, no todo fue una experiencia 'espiritual' para la exnovia de Fernando Alonso, que no dudó en entregarse a uno de los placeres más mundanos para satisfacer a cuerpo y mente por igual. Como no podía ser de otra manera, quiso disfrutar de los suculentos platos de la cocina asturiana ante un plato de fabes del que dejó testimonio a través de sus ‘stories’. No cabe duda de que la presentadora sabe muy bien cómo cuidarse para reponer fuerzas y poder dar lo mejor de sí misma día a tras día.
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