Los comercios más emblemáticos de San Sebastián: compras con esencia donostiarra
El casco viejo de la capital guipuzcoana despacha un puñado de comercios que rebosan encanto, combinan tradición e innovación y representan la auténtica esencia de una ciudad que enamora a cada paso. Comprar en ellos es llevarte a casa un trozo de su alma.
San Sebastián presume de ser cosmopolita, pero también lo hace de unir esa modernidad con la tradición, un perfecto equilibro que ha dado lugar a una ciudad exquisita, distinguida e innovadora. Esa unión la descubrimos en un paseo por su casco antiguo, con una magnífica oferta comercial donde a los locales de las grandes marcas de diseño se unen pequeños comercios artesanales, que pasan de generación en generación, mimando el producto como si de un hijo se tratase.
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Ignacio de Loyola, el santo nacido en Guipúzcoa, dijo: «Alcanza la excelencia y compártela», y es lo que han hecho estos comercios singulares que trabajan aunando una tradición familiar, que en ocasiones se remonta a un siglo de historia, con la innovación necesaria. Las familias que los regentan lo hacen bajo la premisa de la calidad y la originalidad, creando diseños actuales en los que, a menudo, han reflejado el espíritu de esta ciudad costera que tanto aman.
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Para descubrirlos lo mejor será deambular por sus calles, donde nos irán saliendo a nuestro paso escaparates a los que será difícil resistirse. Si buscamos un recuerdo de la ciudad, qué mejor idea que llevarte a casa un pedacito de su esencia.
MARROQUINERÍA DE LUJO EN BOX (San Martín, 12)
Al frente de este comercio de maestros marroquineros, abierto desde 1948, encontramos a Gerardo González, la segunda generación de una familia de artesanos de la piel. Su padre, Manuel González, aprendió el oficio en un taller de guarnicionería, proveedor de la Casa Real cuando veraneaban en San Sebastián. Su madre prácticamente nació en el taller de alta costura del maestro Cristóbal Balenciaga (cuyo museo se puede visitar hoy en día en la cercana localidad de Getaria), el mismo en el que trabajó su abuela y donde aprendió la importancia del detalle. Con esos orígenes nace BOX (boxsansebastian.com), un comercio de obligada visita para quienes buscan algo único y elegante, una creación original que se une a la historia de la propia ciudad.
La oferta de este comercio tiene una línea principal, que es el bolso de mujer, y otra secundaria de caballero, con productos básicos. El buque insignia es un bolso femenino que se diseñó hace 42 años y aún está en su colección permanente. Un modelo atemporal con guiños de actualidad y nombre propio, 8010Y6, que ha actualizado su diseño a lo largo de los años y del que se han realizado distintas versiones sobre la misma pieza base.
Ecodiseño, sostenibilidad…, BOX ha sido pionero en estos conceptos ahora de moda. Desde 2019 todos sus bolsos tienen un revestimiento interior realizado con el tejido sostenible Ondas, que ha basado su diseño en el color de la arena de las playas donostiarras y la forma que las olas dejan en la arena durante la bajamar. También tienen una colección de bolsos sostenibles, Frontoia, que se elaboran a partir del plástico marino que se recupera tras las labores de limpieza de nuestros océanos.
JOYAS ARTESANALES EN CASA MUNOA (Aldamar, 28)
Un referente en la joyería, tanto en San Sebastián como a nivel nacional, la tradición familiar de Casa Munoa se remonta a 1935 (casamunoa.com). Hoy, al frente de este comercio de artesanos joyeros con taller propio encontramos a Claudio Munoa –tercera generación de una familia de joyeros que se inició con sus abuelos, Purificación Roiz y Claudio Munoa, su tío Ricardo Munoa y su padre Rafael Munoa– asesorando a la clientela, de forma pausada y personal, en la elección y el diseño de piezas únicas. Su buen hacer durante más de 80 años han hecho que esta joyería haya sido galardonada con el Premio a la Trayectoria Profesional del comercio de Euskadi en 2022.
Traspasar las puertas de su local es adéntrate en su casa y su historia, un espacio encantador que ha sido reformado conservando la esencia de como fue ideado en el año 58, con preciosos techos de madera, mesas y mostradores artesanales y el taller en la parte superior. Allí Claudio te habla de su pasión por el diseño y la creación de nuevas joyas, transforma y restaura piezas antiguas o idea nuevos diseños artesanales con los más altos estándares de calidad.
No puede haber un recuerdo más bonito para llevarte a casa de San Sebastián que la exitosa joya diseñada por Claudio Munoa llamada Donistibay. Una creación inspirada en la bahía de La Concha realizada en latón macizo recubierto en oro y con un cristal verde marcando la isla de Santa Clara (35 €).
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PERFUMERÍA BENEGAS, LA ESENCIA DE DONOSTIA (Garibai, 12)
A 1908 nos tenemos que remontar para hablar de la historia de los maestros perfumeros de Benegas (perfumeriabenegas.com), un local regentado hoy por la cuarta generación de una familia procedente de Tolosa. Esta se estableció en San Sebastián, al principio, con una peluquería que también ofrecía perfumería, con distinguidos clientes de la época entre los que se encontraba la propia Casa Real, que tenía aquí su residencia de verano. En los años 70, las mujeres de la familia, Charo y Asunción Benegas, toman el liderazgo viajando a Madrid y París, donde se forman en la escuela de Guerlain y de donde regresan con nuevas ideas que transformaron el negocio. Junto a la perfumería introducen productos de cosmética y cabinas de belleza, que se mantienen hoy en día con tratamientos personalizados para sus clientas.
Entre sus fragancias destacan aguas de colonia limpias y frescas y entre estas, la esencia de San Sebastián, llamada SSirimiri. Nace en 2009 para ofrecer a sus clientes un trocito de su ciudad a través de tres fragancias diferentes que transmiten la energía, vitalidad, elegancia y saber estar de la capital donostiarra. Una imagen olfativa que nos llega gracias a sus notas cítricas, de flores o incienso y también al mar, otro de los protagonistas. ¿Qué mejor regalo que llevarte a casa el aroma de la ciudad que has visitado y recordarla cada vez que te perfumes con ella?
VISTIENDO AL FRÍO EN MINIMIL (Garibai, 3)
Abrigos, chaquetas, suéteres…, son las prendas icónicas de este comercio de tradición familiar ubicado en el corazón del casco antiguo de San Sebastián, porque como dicen «no puede haber nadie mejor que una firma de origen vasco para vestir el frío». Una casa, que en 2022 cumplía su 50 aniversario, capitaneada exclusivamente por mujeres. Dos generaciones de una familia, los Zuaznabar-Uzkudun, que han sabido situar Minimil (minimil.es) a la cabeza de la moda vasca. Con influencia del maestro Balenciaga –presente en las formas, la calidad de los tejidos y un excelente patronaje– e inspiradas en la moda de ciudades que visitan, como París o Londres, sus diseños se adaptan al estilo de Euskadi tratando de plasmar la esencia de esta tierra, de sus paisajes, a través del corte y los colores de sus diseños.
Al entrar en la tienda enamoran la calidad de sus lanas, algodones y chachemires, el corte de sus gasas, la confección de sus prendas o los colores. Luego lo hará su comodidad. Junto a la tienda de San Sebastián, Minimil cuenta con otras dos en Bilbao y Vitoria, y sus diseños también se pueden encontrar en el Museo Guggeheim de Bilbao, junto al que crearon una colección especial, la línea ‘New Baque Style’ exclusiva para la tienda del museo. Moda vasca unida a la esencia de este museo convertido en uno de los mayores iconos de esta tierra.
DÓNDE DORMIR JUNTO AL CASCO HISTÓRICO DE SAN SEBASTIÁN
Nos quedamos en el centro, para empezar y terminar nuestra ruta caminando al hotel. Y la mejor opción la encontramos en el hotel boutique Lasala Plaza (lasalaplazahotel.com), con una excelente localización en la confluencia del puerto y la parte vieja, justo al final de la playa de La Concha. ¿Y por qué lo elegimos? Además de por su situación, por su elegante y actual interiorismo, un homenaje a la ciudad de San Sebastián y a la cultura vasca, porque las vistas desde sus habitaciones al puerto, la bahía, la playa y la isla de Santa Clara son un auténtico regalo y porque en ellas se han incorporado la última tecnología y domótica para hacernos la estancia más fácil.
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Para vistas de excepción hay que subir al Rooftop By Lasala Plaza, la terraza más exclusiva de la ciudad, donde además de la increíble panorámica disfrutar de un aperitivo, un cóctel, un desayuno e incluso darte un baño en la piscina si el tiempo acompaña. Y mejor aún, comenzar el día aquí con una clase de yoga junto al cielo de Donostia.
Otras buenas opciones en la zona centro son el mítico hotel María Cristina (espanol.marriott.com) o Feel Free (feelfreerentals.com), que ofrece apartamentos elegantes, de diseño, exclusivos y en las mejores zonas de San Sebastián.
DÓNDE COMER
En una ciudad donde si algo alcanza la excelencia es la gastronomía, lo difícil será elegir en qué local quedarse. Si no queremos irnos lejos, La Jarana Taberna (lajaranataberna.com), perteneciente a Lasala Plaza, no defraudará. El restaurante, capitaneado por el chef Ander González, nos propone un viaje por la cocina tradicional vasca en un lugar de excepción, mirando al puerto. En su carta basada en el producto de temporada no faltan los pescados frescos del día, las anchoas, el bonito, el rape, el txangurro o las verduras del momento. También se puede optar por el menú degustación (60 €).
Para un capricho, el restaurante Amelia by Paulo Airaudo (ameliarestaurant.com/es), en el Hotel Boutique Villa Favorita, frente a la playa de La Concha, con dos estrellas Michelin y un sol Repsol. Su cocina abierta es todo un espectáculo donde se busca la excelencia culinaria a través de un único menú degustación (291 €, sin maridaje). Una experiencia única para un fin de semana de capricho.
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