Te proponemos una ruta de cine por la impetuosa y enérgica naturaleza de Irlanda, que sirvió de escenario de rodaje a ‘El hombre tranquilo’, su película más querida. Con esta entrañable historia de amor protagonizada por John Wayne y Maureen O'Hara, el director de origen irlandés rindió todo un homenaje a la tierra de sus padres.
Las ruinas de la abadía Rosserk, fundada en el siglo VII en el condado de Mayo, una de las más elegantes de su época y de las mejor conservadas.
2/5
Fachada del museo The Quiet Man (El hombre tranquilo), donde se puede adquirir una guía con las localizaciones de la película.
3/5
Castillo medieval de Ashford, uno de los hoteles-castillo más distinguidos de Irlanda.
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Los espectaculares acantilados de Moher, en el condado de Clare, pueden disfrutarse desde un idílico sendero que recorre sus ocho kilómetros de longitud.
