Cuando faltan tan solo unos días para que termine el 2025, un año que ha sido especialmente complicado en términos mediáticos para la Familia Real de Noruega, se ha dado a conocer una preocupante noticia relacionada con la salud de la princesa Mette-Marit. El Palacio noruego ha confirmado que la esposa del príncipe heredero Haakon se someterá a un trasplante de pulmón tras el deterioro de su condición.
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Mette-Marit, de 52 años, fue diagnosticada con fibrosis pulmonar crónica en 2018, situación que ha repercutido en su vida pública, ya que desde entonces ha tenido que limitar el número de compromisos que asume. Apenas en octubre pasado se tomó un mes de descanso para someterse a rehabilitación pulmonar.
Sin embargo, al parecer el estado de salud de la futura reina ha empeorado, pues este 19 de diciembre el Palacio ha dado a conocer en un comunicado de prenda que deberá someterse a un importante procedimiento quirúrgico. “Durante el otoño, se realizaron varias pruebas que muestran un claro empeoramiento de la salud de la Princesa Heredera. Por lo tanto, los médicos del Hospital Universitario Rikshospitalet han iniciado el proceso de evaluación para un posible trasplante de pulmón”, indicó.
“Estamos llegando al punto en que será necesario un trasplante de pulmón, y estamos realizando los preparativos necesarios para garantizar que sea posible cuando llegue el momento. De momento, no se ha decidido cuándo se incluirá a la Princesa Heredera en la lista de espera para trasplante de pulmón”, indicó Are Martin Holm, profesor y jefe del Departamento de Medicina Respiratoria del Hospital Universitario Rikshospitalet, quien es especialista enfermedades pulmonares.
La fibrosis pulmonar es una enfermedad que consiste en la acumulación de tejido cicatricial en los pulmones, lo que dificulta que estos transporten oxígeno al torrente sanguíneo.
“La Princesa Heredera necesita cada vez más un programa de ejercicio específico, descanso y recuperación física. Sin embargo, ha expresado un gran interés en seguir desempeñando sus funciones. Su programa oficial se organizará para adaptar sus actividades a su estado de salud en la mayor medida posible”, agrega el comunicado, dejando ver que, pese a su delicado estado de salud, Mette-Marit está decidida a seguir participando en la agenda pública. La princesa fue vista públicamente por última vez el pasado miércoles 17 de diciembre, cuando junto al príncipe Haakon y sus hijos, la princesa Ingrid Alexandra, de 21 años, y el príncipe Sverre Magnus, de 18, visitaron el hogar de ancianos Langerudhjemmet, en Oslo.
¿Qué ha dicho Mette-Marit sobre su enfermedad?
En 2018, cuando se dio a conocer que había sido diagnosticada con fibrosis pulmonar crónica, la princesa heredera Mette-Marit declaró: “Durante varios años, he tenido problemas de salud de forma regular y ahora sabemos más sobre cuáles son. Aunque un diagnóstico como este limitará mi vida en ocasiones, me alegra que la enfermedad se haya detectado tan pronto”.
“Mi objetivo sigue siendo trabajar y participar en el programa oficial tanto como sea posible”, agregó. Y en 2019, luego de reducir sus deberes reales, la esposa de Haakon de Noruega admitió en entrevista con la cadena de televisión NRK: “Me agoto más rápido que antes, así que hoy tengo que cuidarme más que antes”.