En medio de gran expectación, llegó la visita del Príncipe Harry y Meghan Markle a Reino Unido. Después de su fugaz viaje para participar en las festividades del Jubileo de Platino de la Reina hace un par de meses, en esta ocasión, la agenda es muy diferente. Por primera vez, la pareja se encuentra en el país natal del Duque de Sussex para cumplir con su agenda propia, desde que abandonaron sus posiciones senior dentro de la Familia Real británica en marzo del 2020. El viaje lo realizan justo después de dos semanas de duras declaraciones por parte de Meghan, las cuales los han vuelto a poner en el ojo del huracán. El estreno de su podcast Archetypes provocó que hubiera todo tipo de comentarios, los cuales han hecho más notorio el distanciamiento con los Windsor, a quienes aparentemente no verán en este viaje. A pesar de que los Cambridge están viviendo solamente a unos metros de la residencia que ocuparán en la zona, no está programado ningún encuentro.

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La pareja dejó esta mañana Frogmore Cottage -el que fuera su hogar en Windsor y en donde se han hospedado- para ser trasladados hasta Euston, en donde tomaron el tren que los llevaría a Manchester. Es ahí en donde participaron en la cumbre One Young World, en la que se han reunido jóvenes líderes de 190 países. Meghan ha sido la encargada de dar un discurso sobre la equidad de género, en lo que será su primer día de actividades antes de viajar a Alemania para los eventos alrededor del anuncio de los Invictus Games.

En medio de un distinguido grupo de invitados como el alcalde de Manchester Andy Burnham y Sir Bob Geldof, los Duques de Sussex tomaron su lugar en la primera fila del escenario. Sonrientes y saludando al público, se les veía celebrando el inicio de esta cumbre. “Es muy lindo estar de vuelta en Reino Unido”, comenzó Meghan su discurso, que resonaba especialmente por las palabras que ha dado en sus últimas entrevistas e intervenciones en su podcast. La Duquesa dijo a los jóvenes que no solamente son el futuro, sino también el presente y que están llevando a un cambio positivo y necesario en todo el planeta.

Dejando claro que quería llevar un statement look, Meghan apostó a ir en rojo de pies a cabeza. Esta vez, llevó una blusa de cuello alto con falsa bufanda modelo Georgette de Valentino de 1,900 dólares (alrededor de $38 mil pesos mexicanos). En el mismo color lució un pantalón de vestir, aparentemente de la misma firma italiana. El toque final lo han dado unos sensuales tacones Aquazzura.

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El primer look de Meghan

Para transportarse a esta importante aparición, Meghan ha querido apostar por un look que muestre profesionalismo, sin perder el estilo. En las primeras imágenes que fueron capturadas antes de que la pareja tomara el tren camino a Manchester, en donde se está llevando a cabo el evento, se vio a la Duquesa llevando un suéter estilo polo de punto con botonadura y mangas cortas modelo Eleanor de Brandon Maxwell, que se puede conseguir por $17,500 pesos mexicanos. Lo combinó con unos pantalones de vestir de tiro alto con corte pata de elefante en el mismo color, que llevó con unos tacones Manolo Blahnik. La melena la llevó con ligeras ondas recogida en una cola de caballo baja, que permitían ver a la perfección sus arracadas.