Carmen Herrera fue una destacada artista cubana, reconocida por haber sido pionera en la abstracción geométrica y el modernismo latinoamericano. Nació el 31 de mayo de 1915, en La Habana. Fue hija de uno de los fundadores del diario cubano El Mundo, mientras que su madre era reportera y filántropa.
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En las décadas de 1930 y 1940, vivió entre Francia y Cuba. Antes de dedicarse de lleno al mundo del arte, estudió arquitectura por un tiempo en la Universidad de La Habana. Se formó en la Art Students League, en Nueva York antes de exponer cinco veces en el Salon des Réalités Nouvelles, Musée d’Art Moderne de la Ville de París, Francia, entre 1949 y 1953. En la década de los cincuenta, se casó con Jesse Lowenthal, un profesor de literatura. En 1954, Carmen se estableció en Nueva York, donde vivió y trabajó hasta su muerte, el 12 de febrero 2022 a los 106 años.
Sus estudios previos en arquitectura influyeron en el estilo de sus obras, pues estas estaban orientadas hacia las formas geométricas, la simplicidad y el minimalismo. Pese a su talento, Carmen Herrera se enfrentó a la discriminación por partida doble; primero por ser el simple hecho de ser mujer, y segundo, por sus orígenes latinos. Aunque esos factores dificultaron la comercialización de su obra, esto no fue impedimento para que continuara creando e innovando.
Expuso junto a a Theo van Doesburg, Max Bill y Piet Mondrian, y una generación más joven de artistas latinoamericanos, como miembros de Los Disidentes (Venezuela), los Concretistas (Brasil) y el Grupo Madí (Argentina). A mediados de la década de 1960, experimentó con paletas de colores mucho más reducidas, combinando el negro o el verde con el blanco.
"Ser ignorado es una forma de libertad. Me sentí liberada de tener que complacer constantemente a los demás".
Por esa misma época, concibió la idea de poner una pausa en su carrera como pintora para dedicarse a la escultura. En 1966, creó la serie Estructuras antes de dejar la pintura y empezar a trabajar en sus primeras esculturas, influenciadas por su formación previa en arquitectura. Como la propia Carmen lo explicó, Estructuras está basada en "pinturas que claman por convertirse en esculturas". Dicha serie se expuso en 2018 en la Lisson Gallery, en Nueva York.
Aunque comenzó su carrera artística en los años 40, su trabajo no fue reconocido hasta muchos años después, cuando tenía más de 80 años. Fue en 2004, con 89 años, cuando logró vender su primer cuadro.
"Nunca en mi vida tuve idea del dinero y pensaba que la fama era una cosa muy vulgar... y al final de mi vida estoy recibiendo mucho reconocimiento, para mi sorpresa y mi placer", dijo en 2009 a The Observer.
Sus obras fueron expuestas en Nueva York y en el Whitney Museum of American Art se presentó una retrospectiva de su arte en 2016. También presentó su arte en el Museo Pfalzgalerie de Alemania, la Galería Ikon de Birmingham, en Inglaterra, el Wexner Center of Arts en Columbus, Ohio, el Museum of Fine Arts, en Houston, Texas, entre otros.
De forma póstuma, con su obra Día Feriado, Carmen Herrera se unió a un grupo selecto de artistas cuyas obras forman parte de la colección de la Casa Blanca. Herrera es la primera artista de raíces latinas cuya obra figura en los fondos permanentes de la residencia presidencial de los Estados Unidos.