Alejandra Espinoza regresa a 'Noche de Estrellas' de Latin GRAMMY: 'Estoy donde siempre soñé estar'

Me siento contenta. Obviamente, para mí, absolutamente todo lo que hago representa algo importante. La última vez que estuve en ‘Noche de Estrellas’, si no me equivoco, fue con mi niño, hice la alfombra con él. Y la verdad es que siempre es cool para mí trabajar en alfombras, es cool para mí trabajar, ver de nuevo a mis compañeros de trabajo, pasarla bien. La verdad es que estoy muy emocionada.

La verdad, quiero algo así como muy ‘girly’, muy femenino, es lo que estoy buscando. No sé por qué, pero la mayoría de las veces he vestido de tonos muy oscuros. Entonces, ahora quiero algo así como muy clarito, a lo mejor un baby pink, baby blue, algo más femenino, con cortes así, femeninos, bonitos, a lo mejor algún tul o alguna transparencia, pero tampoco tanto. Quiero verme más así, más angelical, se podría decir.

La verdad es que estos Latin GRAMMY para mí son muy especiales, justo por eso, porque tengo la oportunidad de esa noche compartir algo que me tiene muy emocionada, que me tiene de verdad muy contenta y con mucha expectativa para el próximo año. Creo que Dios ha sido muy bueno conmigo y en esta ocasión se está ‘volando la barda’ porque estoy a punto de comenzar algo que me tiene muy emocionada, que creo que a la gente le va a gustar mucho también. 

Y creo que se escogió Latin GRAMMY porque es un show que la gente le gusta, que la gente cree. Creo que también es una buena oportunidad para dejarle saber a la gente acerca de este proyecto, que no solamente es importante para mí, sino también es importante para la cadena. Es algo que me tiene llena de ilusión, tanto a mí como a mi familia también.

Sí, me acuerdo. Esa primera vez que estuve en los Latin GRAMMY, traía un vestido blanco, efectivamente. Me acuerdo de que era mi primera alfombra de Latin GRAMMY. Ni siquiera sabía exactamente cuál era el dress code. 

Recuerdo que ese vestido me lo hizo un chico, y ahí el chico que me lo hizo fue de Houston. Y bien emocionante, obviamente, como toda primera vez, bien primeriza, no sabía ni qué esperar, no sabía qué hacer, no sabía nada. Solamente fui, hice aparición de alfombra, no me tocó trabajar en esa ocasión, pero la recuerdo muy bien. Me acuerdo perfectamente de que yo me arreglé solita en esa ocasión, me maquillé, me peiné sola, el vestido me lo mandaron de Houston. Y es un vestido que me volvería a poner, fíjate. 

La mayoría de los vestidos que yo me he puesto para las alfombras, creo que la mayoría me atrevería a ponérmelo nuevamente.

Amuleto como tal no, pero trato siempre de prepararme muy bien cuando voy a trabajar. Hace mucho que no hago una alfombra, o sea, que no conduzco una alfombra, pero yo sé la importancia de la preparación para una alfombra. De hecho, la preparación para una alfombra lleva más tiempo que prepararte para conducir el show como tal, porque acá tú tienes que conocer perfectamente los artistas, cuáles son los artistas que van a pasar, los nominados.

O sea, tienes que tener mucho más contenido del show que cuando vas a conducir el programa como tal, como me ha tocado hacer en otras ocasiones en Premio Lo Nuestro, Premios Juventud. Pero las alfombras requieren más preparación y obviamente, en cuanto me den toda la información que necesito, me dedico un buen tiempo en prepararme, en leer, en saber quién va a estar, cuáles son los nominados, quién ha ganado el Latin GRAMMY a quién voy a entrevistar. Obviamente, para mí todos los artistas tienen la misma importancia, pero hay ciertos artistas que llevan una trayectoria mucho más larga y son a los que probablemente se va a intentar entrevistar dentro de la alfombra. Y sí, para mí estar preparada es lo más importante, la verdad.

Y en cuanto a rituales y todo eso, pues no. O sea, yo siempre hago una oración antes de empezar un show, oro y le pido a Dios que me dé la gracia para poder hacer un buen trabajo. Y me dedico también a disfrutar. 

Ya una vez que uno se prepara, ya lo que sigue es disfrutar. Don Francisco siempre me decía una frase que a mí me encanta y que siempre la pongo en práctica en absolutamente todo lo que hago, que es: ‘La clave de la improvisación’. O sea, si tú te preparas, puedes improvisar, puedes hacer un buen trabajo y lo más importante es que te queda tiempo también para disfrutar.

Fíjate, yo nunca me he quedado con ningún vestido. Yo no tengo vestidos desde cuando he trabajado, porque casi siempre me los consigue mi estilista y todo eso. Ese es el único vestido que yo tengo guardado y que espero guardar por siempre. Y espero también en algún momento de mi vida volver a ponérmelo, hacerle algún tipo de ajuste o lo que sea. Pero la verdad es que sí, para mí esa ha sido esa y cuando Matteo me acompañó a la alfombra, han sido mis años favoritos, o sea, mis alfombras favoritas. Recuerdo muchísimo ese día, recuerdo la emoción que sentía, recuerdo haber ido con mi vestido en su bolsita para que nadie viera el color del vestido. 

Estaba muy emocionada, obviamente, siempre hablar de mi hijo, hablar de mi familia, para mí es muy emocionante y ese día fue bien importante y me encantó haberlo hecho de esa forma. Esa imagen me encanta, o sea, no tienes idea cómo está en mi memoria la imagen de cuando aparezco y digo: ‘Tarán, es niño’. Me encanta.

Le encanta. De hecho, yo todos los años, le hago un video a Matteo de ese año de vida. 

El último video le hice, obviamente, de los 9 a los 10 y así voy sucesivamente. Y él siempre me dice que, aunque él no aparece como tal, o sea, no sale su cara, pero dice que este es uno de sus momentos favoritos. Pero también, por la manera como se hizo, que yo salgo: ‘Tarán’. Y él le encanta, claro que sí.

Ya, hace rato ya estamos, no te voy a decir que he batallado, porque Matteo es un niño bien bueno, la verdad, pero sí los cambios de humor, de repente, de repente contesta como no contestaba antes. Pero lo tenemos muy claro, mi esposo y yo en que obviamente son etapas por las que va a pasar y tratamos, dentro de lo que podemos, controlárselas, porque obviamente, yo creo que es una etapa muy importante, porque es la etapa donde los niños se te pueden salir de las manos, por mucho que los hayas cuidado, por mucho que los hayas criado, por mucho que los hayas tratado de educar, las hormonas y los amigos y todo, obviamente, sí pueden influir mucho en la forma en la que él se comienza a comportar.

Entonces, sí tratamos de tener control como que, en esa parte, pero sí, se le nota ya. Es más, ya es un pre-teen, pero a veces actúa como teenager (adolescente). Y justamente el día de ayer estaba acostado con nosotros y me dice: ‘Mamá, cuando yo tenga 25 años, ¿me vas a seguir tratando como un niño?’. Y le digo: 'Yo siempre te voy a tratar como mi bebé’… A él le gusta, le encanta hacerse, así como el chiqueado (mimado).

La pregunta es: ‘¿Tú vas a querer que yo te trate como un bebé?’. Porque obviamente yo sí, pero ya una vez llega un momento en que me imagino que ellos no quieren que uno los trate, así como bebés.

Yo creo que ha sido que tenemos muy buena comunicación. Aníbal y yo somos esposos, pero también somos muy buenos amigos. O sea, somos amigos, somos confidentes. Si yo tengo que decirle un chisme a alguien, la primera persona que le digo el chisme es a él. 

Somos muy buenos amigos, nos llevamos superbién. Nos llevábamos muy bien cuando éramos amigos, nos seguimos llevando superbién. Creo yo, yo te hablo por mí, creo yo que no tenemos ningún tipo de secretos. Todo lo nos queremos decir, nos lo decimos, aunque nos duela. 

Somos muy sinceros el uno con el otro siempre. Desde un principio siempre me lo dijo, (que) él iba a permitir que yo me equivocara para que yo pudiese aprender de mis errores. Y yo también cuando veo que a lo mejor algo no está siendo correcto, también permito que se equivoque, porque también es parte del crecimiento del ser humano; que no tienes alguien que te está diciendo lo que tienes que hacer todo el tiempo, porque entonces tú no creces. Y yo creo que es eso, pero siempre he pensado que comunicarte con tu pareja, eso yo sé que es como que una frase muy trillada, pero es muy real.

Y no solamente hablando de la pareja, con la gente que tienes alrededor, la comunicación siempre va a ser parte de que esa relación funcione y que se siga madurando.

Yo creo que hace rato que ya no me afecta para nada. Yo siento que yo, por ejemplo, soy una persona que no le hace daño a nadie. Yo hago las cosas porque las hago con amor, las hago con pasión. Es como, te voy a decir lo que siempre le digo a mi niño, o sea, si tú diste a tu 100%, no hay nadie que te pueda decir lo contigo.

Nadie te puede criticar, porque a lo mejor tu 100%, a lo mejor es el 15% de alguien más, pero es el 15% de alguien más, el tuyo. Mientras uno haga lo que uno cree que es correcto, no tienes por qué sentirte mal cuando alguien te critica. Y para mí es bien importante educar con el ejemplo a mi niño, yo no le puedo decir a él: ‘No te frustres por lo que tus compañeros están diciendo’ y de repente que me ve estresada porque alguien está hablando de mí. Entonces, yo no voy, yo trato de agarrarlo todo en broma, de verdad.

O sea, si alguien me dice algo en las redes, yo lo agarro en broma, porque es que, te repito, cuando tú sabes que no estás haciendo nada malo, cuando tú sabes que tú estás lo correcto porque tu corazón así te dijo que lo hicieras o que dijeras algo o que actuaras de cierta forma, no te puedes sentir mal, porque todo el mundo tiene una forma de ver las cosas diferente.

¡Ay! Qué increíble, eso fue el año. Fíjate que Thanksgiving, que es una tradición adoptada por nosotros los mexicanos, es una de mis fechas favoritas, es uno de mis días favoritos, porque creo que es el único día al año, pese a que Navidad debería serlo, por el nacimiento de Jesús, pero realmente Thanksgiving es el único día donde uno realmente no esperas nada, no es como solamente estás con familia, das gracias. ¿Por qué estoy agradecida? Porque Dios es bueno. Estoy agradecida porque he tenido muchas bendiciones. Estoy agradecida porque tengo 38 años y estoy donde siempre soñé estar.

Tengo paz mental, tengo paz emocional, tengo lo más importante, la salud de mi familia. Creo que he sido muy bendecida en mi vida como para no estar agradecida, no solamente un día al año, sino todos los días. Trato de practicar el agradecimiento todo el tiempo, porque de verdad que creo que ya solamente con el hecho de despertarnos todos los días es una oportunidad para hacer cambios en nuestra vida que no nos gustan, es una oportunidad para hacer cosas diferentes, es una oportunidad para pedir perdón, para hacer una llamada, es una oportunidad para salir adelante. Entonces, yo vivo ahora mismo una vida feliz, una vida plena y obviamente no fue de la noche a la mañana, pero sí te puedo decir que por eso, o sea, por lo que estoy viviendo ahora mismo, yo sí le doy gracias a Dios en ese día.

Ay, estoy feliz. De verdad que, si no me gustara tanto, si no amara tanto, yo le digo a mi esposo todo el día: ‘Si no amara tanto estar en la radio ya hubiese renunciado’. Porque los horarios sí son bien cañones. Pero amo mi equipo de trabajo. Amo a Luis, a Erika, a Panda. Es como una terapia para mí todos los días. O sea, yo salgo de ahí feliz, salgo de ahí drenada, saco absolutamente todo, me río.

O sea, en ese show reímos, lloramos, compartimos con el público. Tengo la oportunidad de tener una conexión con el público que nunca había llegado a tener. Yo voy a la calle, literalmente, el otro día mi hijo y yo comiendo y estábamos platicando y se me acerca un señor y me dice: ‘¿Usted es la de la radio, la de las mañanas?’ y le digo yo: ‘Sí’. Y cuando me mira me dice: ‘Pero usted es Alejandra Espinoza’. O sea, él me escuchaba en la radio, él no sabía que era yo. Me reconoció por la radio y cuando me reconoció por la radio, supo que yo era Alejandra Espinoza.

Fue muy chistoso, es como que la primera vez que me pasa eso. Pero también me ha tocado que, en Los Ángeles, como que conecté mucho más con el público de Los Ángeles, y eso ya era algo que tenía muchas ganas de hacer de hace años. La gente no sabía que yo vivía en Los Ángeles. La gente pensaba que yo vivía en Miami y que viajaba de vez en cuando para allá. Entonces, he tenido oportunidad de compartir con los radioescuchas. Hay una comunidad muy bonita de la radio que es muy diferente a la comunidad de la televisión. Entonces, son como dos, son dos mundos totalmente distintos. Y la verdad es que me gustan ambos, me gustan ambos, pero el de la radio es como que con más conexión. Hay una conexión distinta con el público.

Mi próximo maratón es ahora antes de que se acabe el año. Bueno, medio maratón. Pero el próximo año, al principio de año tengo bastante trabajo, no voy a poder hacer ningún maratón, pero probablemente me vaya para hacer el maratón de Berlín. El próximo año mi meta es hacer el maratón de Berlín.

En cuanto a familia, para mí, el estar con mi familia es lo más importante. El próximo año tengo un proyecto del cual les voy a hablar ahora en la alfombra de los Latin GRAMMY. Entonces, en ese proyecto, obviamente está mi familia incluida, porque para mí, a donde yo voy... Nosotros siempre les digo: ‘Somos como un equipo de fútbol, a donde va la bola, ahí va todo el equipo’. Porque es la única forma en que la familia se mantiene unida y mantenemos la unión con el niño, especialmente. Y nos hemos dado cuenta a través de los años, mi esposo y yo, que nuestro hogar es donde estamos los tres. 

Nos hemos dado cuenta de que hemos rentado hoteles carísimos y hoteles espectaculares, o hemos vivido en casas espectaculares, pero somos felices así cuando nos vamos a un hotelito donde dormimos los tres en la misma cama, donde estamos los tres juntos. Juntos, para mí, es como que lo más importante para que una familia se mantenga unida y se mantenga bien. Y el proyecto que tengo el próximo año, pues es así. Ahí vamos todos como muéganos, como siempre, y con mucha expectativa para el próximo año. 

Este año aprendí sobre la paciencia, de verdad. Yo soy muy desesperada a veces. A veces, yo quiero las cosas como muy rápido y a veces quiero que los cambios sean muy rápidos. Aprendí sobre la paciencia y justamente desde que empecé a trabajar en la radio. 

Aprendí que los cambios vienen poco, aprendí que mientras llega lo que tú deseas, trabaja duro y trabaja con pasión y trabaja contenta. He aprendido también este año. Este año tuve un gran año espiritual.

Sí, muchos todavía tengo. Yo soy agradecidísima con Dios todos los días, pero también soy muy ambiciosa y todo el tiempo estoy Y si hacemos esto, y si hacemos esto, otra. Tengo muchas ganas de escribir un libro, estoy en eso. Estoy trabajando muy duro para que mi boutique, que se llama Style Rebellion, siga creciendo. Estoy trabajando en un proyecto de skincare, estoy trabajando en un proyecto de ropa deportiva, estoy haciendo muchas cosas, muchas cosas que me tienen muy ilusionada, pero voy así como que paso a pasito, tratando de hacer que las cosas salgan bien, porque estoy muy atrabancada.

Soy de repente como: ‘Sí, vamos a hacerlo todo junto, todo en este momento’, y me dreno, y después ya quien me levanta del piso… es difícil. Entonces, yo últimamente digo, por eso también he trabajado la paciencia este año, donde voy como que poco a poquito para que las cosas salgan bien. Pero sí, tengo muchas cosas, muchos deseos por cumplir. Tengo también, se me había olvidado, tenemos el próximo año también un proyectazo con mi esposo y yo en Miami, que nos tiene supercontentos, que la pensamos mucho, estamos emprendiendo en un negocio y nos tiene muy ilusionados, algo en lo que yo creo cañón, algo que me gusta.