La residencia de Bad Bunny No Me Quiero ir de Aquí, en Puerto Rico, ha sido un gran éxito en el que fans del artista y un desfile de celebridades se dieron cita para disfrutar de los temas del cantante en un show histórico para la isla. La noche de este jueves, el artista ofrece el último de los 31 conciertos acordados en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot; y lo hace en medio de un debate legal en el que se ve involucrada 'la casita', la parte VIP en el recinto que se ha convertido en un ícono de sus presentaciones.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 5 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 5 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Román Carrasco Delgado, de 84 años, acusa al intérprete de Tití Me Preguntó por utilizar su propiedad, mejor conocida como "la casita" más allá de los acuerdos a los que habían llegado. Es decir, Bad Bunny y su equipo habrían replicado la estructura original para fines comerciales sin su consentimiento. Don Román, como lo conocen en Humacao, en donde se encuentra la estructura original, puso una demanda millonaria en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan contra el intérprete y las compañías Rimas Entertainment, Move Concerts y A1 Productions.
En los documentos oficiales, Carrasco explica que sólo habría permitido que se grabara un cortometraje, pero la fachada se ha vuelto un ícono en publicidad del reciente material discográfico del artista, DeBÍ TiRAR MáS FOToS; todo sin el consentimiento del señor Román.
Si bien había firmado un documento digital, explica que no comprendió los detalles por los que se le pagaron sólo cinco mil 200 dólares, por lo que ahora la demanda asciende a seis millones de dólares, por supuesto enriquecimiento indebido. Además, señala que ha tenido daños emocionales, ya que su casa, al ser parte del este tour y de la promoción del artista, se convirtió en un punto turístico para los fans de Bad Bunny, con lo que resulta afectado al ver a tanta gente interesada en su propiedad y tomando fotos.
Hasta el momento, ni el cantante ni las empresas relacionadas han emitido una respuesta sobre la demanda. En cambio, Bad Bunny se enfoca en el cierre de esta residencia con la que daría paso a una gira junto a sus nuevos éxitos, además de los temas con los que llegó a la fama.
Dayanara Torres, el tour por 'la casita'
La semana pasada, Dayanara Torres llamó la atención por ser una de las varias celebridades en disfrutar del concierto de Bad Bunny en su natal Puerto Rico. La ex Miss Universe 1993 vio todo desde la famosa casita, en donde bailó, cantó y hasta se tomó fotos mientras el intérprete cantaba frente a ella.
Días después, la también presentadora compartió un recorrido por esa casita que a tantos ha llamado la atención. Dentro pudimos ver una sala, con un televisor funcionando, además de una barra de bebidas con refrigerador incluido. "Es una casa funcional, esa es la cocina, la nevera, esta es la sala, podemos ter televisión", explicó Dayanara mientras caminaba por la casa de un piso, asegurando que es un lugar que le recuerda a las típicas casas de los abuelos puertorriqueños.