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En el pensamiento de Itatí Cantoral resuenan las sabias palabras de su padre, el compositor Roberto Cantoral, quien en su canción El Reloj plasmó la añoranza que deja el implacable paso del tiempo. Ante sus ojos, ver crecer a sus hijos, los gemelos Eduardo y Roberto, de 24 años, así como María Itatí, de 16, la más pequeña, es todo un privilegio, aunque desearía revivir la historia de sus primeros años como mamá; volcada en esos días de cuando llevaba a sus pequeños a la escuela o montaba con ellos la bicicleta. Inmersa en sus nuevos retos profesionales, y de cara a cumplir un año más de vida el próximo 13 de mayo, la actriz nos concede una entrevista personal desde Miami, ciudad en la que ahora reside de manera temporal mientras graba la serie televisiva Velvet, el nuevo Imperio, de la cadena Telemundo.
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La celebración de Itatí junto a tres hijos
La distancia no es obstáculo para Itatí cuando se trata de compartir con su familia. Con el ferviente deseo de escribir nuevas memorias junto a Eduardo, Roberto y María Itatí, emprendió una escapada a uno de sus lugares favoritos, desde donde protagonizó una memorable sesión de fotos que ha compartido con ¡HOLA! para celebrar el Días de las Madres, una fecha muy entrañable para ella.
“Fuimos al mar, como siempre, dimos muchísimas gracias a Dios, nosotros somos muy creyentes gracias a mi mamá y a mi papá, sobre todo mi papá era Guadalupano y siempre me enseñaron esa fe en el catolicismo y en Jesús. Le dimos muchas gracias a Dios, yo por estar con salud, por estar viva y por esos tres hijos maravillosos que la vida me dio, porque siempre soñé con ser madre… Nos pusimos a platicar en la playa, fue muy divertido…”, reveló.
Espero que el tiempo se vaya un poco más lento porque si algo disfruto en esta vida es convivir con ellos"
Itatí nos compartió cómo esa escapada al mar también fue la oportunidad ideal para revivir recuerdos de la boda con su exesposo Eduardo Santamarina, padre de los gemelos, pues con ellos en la playa estuvo presente el estilista que ese día se encargó de arreglarla. “Le contó a mis hijos muchas anécdotas muy hermosas de cuando me casé por la iglesia con su papá. Todo fue con muchísima añoranza, mucha alegría, María Itatí también muy contenta porque sabe que me gusta mucho celebrar en familia, me regaló unas flores hermosas y una carta por adelantado y ella es la princesa de la casa, la favorita de los hermanos…”.
Quisiera detener el tiempo
Con el atardecer de Miami como telón de fondo, Itatí celebró la dicha de ser una madre feliz, soltera, realizada y con la ambición de conquistar nuevos retos en todo sentido. Sin embargo, al volver la mirada atrás y ver lo mucho que han crecido sus hijos, la nostalgia y los recuerdos la hacen querer aferrarse al tiempo.
“Dar amor, dar mucho amor y más amor y perdonar y amar. Es el amor incondicional el más verdadero, el único real. Por supuesto que sí me gustaría tener más tiempo, por ejemplo, me gustaría que el reloj se parara como decía mi papá: ‘Reloj no marques las horas porque mi vida se acaba’. Así me encantaría, que el reloj parara el tiempo y que mis hijos volvieran a ser esos niños que yo llevaba a la escuela o con los cuales yo jugaba y nos montábamos en la bicicleta. Siempre hemos sido muy buenos amigos, ahora ellos ya están grandes…”, compartió.
Si volviera a nacer los volvería a escoger a ellos como hijos"
A pesar de ello, María Itatí se ha convertido en su compañía y mejor cómplice de vida, orgullosa de guiarla y brindarle todo el amor necesario. “Gracias a Dios María Itatí todavía me queda. Tiene 16 años y solo, de verdad, espero que el tiempo se vaya un poco más lento porque si algo disfruto en esta vida, lo mejor que me ha pasado y lo mejor que me sucede es estar con ellos, convivir con ellos y me encantaría tener más tiempo para estar con ellos…”.
Sus hijos, universitarios y con la firmeza de conquistar sus sueños
Cada etapa en la vida de sus hijos es para Itatí motivo de orgullo. Como responsable de su familia al ser una mamá soltera, según comparte, pone primero a su familia por encima de su carrera. Los gemelos ahora se enfocan en sus estudios profesionales, mientras que María Itatí viaja con ella a todos lados, siempre con la disposición de dar seguimiento a sus estudios a distancia.
"Mi hija nos apoyó en la escuela, está tomando clases en línea hasta que termine este proyecto para regresar a México. Eduardo, él es actor, acaba de terminar su segunda película, está en Londres, vino a visitarme y a conocer a los ejecutivos de Telemundo porque hay algo cocinándose por ahí con la empresa de Telemundo, y mi hijo Roberto vino a celebrar mi cumpleaños es el 13 de mayo y él está justamente en exámenes finales en el colegio de Mesa, en Colorado, donde juega futbol como defensa central y este semestre se gradúa, así que puras bendiciones…”.
El noviazgo de sus hijos, una etapa que disfruta Itatí
Consciente de lo mucho que han crecido sus hijos, Itatí también asume con madurez y entusiasmo saber que los jóvenes comienzan a trazar planes en el terreno sentimental. Feliz de ser testigo de cada una de estas etapas, nos compartió cómo vive el presente al ver a los jóvenes ilusionados y enamorados.
“Es una nueva etapa, padrísima que yo disfruto mucho. Roberto tiene una novia encantadora, se llama Zaire, es una mujer de Colima, es una mujer de familia, de principios, de valores, tiene una familia muy unida. Adoro a Dora, que es su madre, una mujer fuerte, mexicana, muy poderosa, muy echada para adelante. Mi hijo está feliz, son novios, pero llevan un noviazgo largo. Eduardo ha tenido relaciones esporádicas, es muy joven y ya le llegará el verdadero amor…”.
A propósito, la actriz también nos reveló que su hija menor ya tiene novio, por lo que ahora se enfoca en guiarla y apoyarla en ese sentido. “María Itatí, yo siempre apoyo a sus pretendientes, ahora tiene un novio que me cae muy bien. Yo siempre trato de apapachar a las personas que están con mis hijos para hacerlos sentir bien. Yo la apoyo en todo lo que ella quiera, trato de no contradecirla, trato escucharla y sobre todo me preocupa mucho que sea feliz. Yo creo que es la preocupación de todos los padres e intento acompañarla en su vida… es el segundo novio…”, confesó.
Un rotundo agradecimiento a sus hijos
Con el corazón en la mano, Itatí hizo énfasis en lo mucho que le ha dado la maternidad, lo profundo de entregarse a esta tarea que ha sido enriquecedora en todo sentido. Desde lo más profundo, dedicó unas palabras a sus hijos, quienes son su mayor soporte e inspiración.
“Agradezco a esta vida maravillosa porque me tocaron tres luceros que han iluminado y que siguen iluminando mi vida, que no hay seres que me hayan hecho tan feliz como ellos y que son mis pilares, son mi fuerza, mis ganas de vivir y si volviera a nacer los volvería a escoger a ellos como hijos”.