,type=downsize)
Con una fortuna estimada que rebasa los 100 mil millones de dólares, Bill Gates es uno de los hombres más acaudalados del mundo. Sin embargo, no todo en su vida tiene que ver con su riqueza, pues el magnate es también un dedicado padre de familia. Recientemente, Phoebe, la menor de los tres hijos que comparte con su exesposa Melinda French Gates, sorprendió a todos al hacer una inesperada revelación sobre su famoso padre, concretamente respecto a su desconocido diagnóstico médico.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Phoebe, quien tiene 22 años y estudió en la Universidad de Stanford, sostuvo una charla con Alex Copper para su podcast Call Her Daddy. Y mientras hablaba de las dificultades que atravesó cuando llevaba a casa a chicos con los que estaba saliendo, reveló que su padre tiene síndrome de Asperger, clasificado como parte del espectro autista.
“Mi papá es bastante torpe socialmente... Tiene síndrome de Asperger”, contó Phoebe a la anfitriona. “Llevar a un chico a casa es aterrador para él. También es bastante gracioso para mí. Es muy gracioso. Pero para los chicos, creo que se ponen muy nerviosos”, admitió. Y no es para menos, pues para cualquier pretendiente podría resultar muy intimidante el simple hecho de conocer al fundador de Microsoft.
Phoebe continuó compartiendo una anécdota de la reacción de su padre ante su cita para un baile escolar. “Nunca olvidaré el comienzo de la secundaria, antes de tener un novio en serio. Fue uno de mis primeros bailes, quizá en segundo o tercer año, y mi madre había inscrito a mi padre para que nos llevara al chico y a mí al baile juntos", recordó Phoebe.
Todo parecía marchar con normalidad hasta que Bill se detuvo en un restaurante de comida rápida y llamó a la cita de su hija por el nombre equivocado. “Literalmente me moría. Pero, sinceramente, creo que ahora es más fácil para mí porque es divertido cuando le presentas un chico a tu padre; dependiendo de cómo reaccione, así es como sabes si será un buen chico o no”, reflexionó la joven, quien junto a su amiga Sophia Kianni creó Phia, una exitosa plataforma digital de moda.
El propio Bill Gates ya se había referido a su probable diagnóstico
Si bien el magnate de la tecnología no se ha referido públicamente a la revelación de su hija, en 2023 ya había abordado el tema sobre su posible diagnóstico en sus memorias Source Code. En su libro, Bill mencionó que, de haber pertenecido a una generación más joven probablemente le habrían diagnosticado autismo. “Era un niño hiperconcentrado. Me perdía tanto en lo que hacía que se me olvidaba comer”, recordó. “Probablemente, hoy me habrían diagnosticado autismo, y eso no está nada mal; es parte de mí”, opinó.
Y en una entrevista concedida a Axios el pasado mes de febrero, el empresario habló abiertamente sobre cómo se dio cuenta de que era diferente de sus compañeros mientras crecía. “Siempre supe que era diferente en maneras que confundían a la gente en términos de mi nivel de energía e intensidad, y de ir y simplemente estudiar cosas”, contó. “Y es un poco confuso cuando eres un niño, que eres diferente, o que la gente reacciona ante ti de ciertas maneras, o que tus habilidades sociales… te hacen fallar en varias cosas”, agregó. “Definitivamente creo que mis padres, quizás un poco sin intención, porque no había un diagnóstico, pero la forma en que me explicaban las cosas o me empujaban a socializar fue muy útil”, consideró.
¿Qué es el síndrome de Asperger?
La Organización Mundial de Salud (OMS) describe el síndrome de Asperger como un trastorno del neurodesarrollo que está actualmente incluido en la parte más funcional de los trastornos del espectro autista. Se caracteriza por dificultades en la comunicación e interacción social, una inteligencia promedio o superior y ausencia de un retraso significativo en el lenguaje.