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Después de muchos meses sin acudir a un acto público, Carlota Casiraghi ha reaparecido este fin de semana en la clausura del Concurso Internacional de Saltos de Montecarlo. Lo ha hecho acompañada de su madre, la princesa Carolina, y también de su hijo Raphaël, que se convirtió en el gran protagonista de la jornada. El pequeño se mostró de lo más curioso y atento a todo lo que pasaba a su alrededor y enamoró a la cámara con sus intensos ojos azules. Hacía mucho tiempo que no le veíamos y estas imágenes han servido para darnos cuenta de que ha crecido mucho y ya es todo un hombrecito. La reaparición de Carlota con su hijo se ha convertido en el centro de todas las miradas, sin embargo, lo cierto es que para ella el hecho de acudir a este acto ha tenido un doble significado

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Hace ocho años, la sobrina de Alberto de Mónaco acudió a este mismo evento y las imágenes dieron la vuelta al mundo. ¿El motivo? Carlota confirmó con gestos lo que no dijo con palabras: estaba embarazada. La hija de la princesa Carolina lució un impecable traje de chaqueta y pantalón de color béis que dejaba al descubierto sus curvas premamá. Carlota, que es presidenta honoraria de la competición desde hace más de una década, estuvo durante toda la entrega de premios muy pendiente de su atuendo y hasta colocó sus manos por debajo de su barriga, protagonizando unas imágenes que no dejaban lugar a dudas.

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Además de lucir una silueta más redondeada de lo habitual, las cámaras de los fotógrafos captaron un instante de lo más significativo, cuando Carolina de Mónaco miró con una tímida sonrisa la 'tripita' de su hija. Carlota, que en ese momento tenía 27 años, estaba esperando su primer hijo junto al actor francés Gad Elmaleh, con el que terminó su relación en 2015 tras cuatro años juntos. Quién le iba a decir que en el futuro volvería a acudir a la clausura del Concurso Internacional de Saltos de Montecarlo, esta vez acompañada por su hijo.

- Los piropos de Gad Elmaleh a Carlota Casiraghi en su papel de madre

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Carlota Casiraghi ha retomado sus compromisos oficiales en Mónaco de lo más feliz, radiante y con un look muy llamativo que no dejó indiferente a nadie. Cabe recordar que no la veíamos en su país desde hace doce meses, cuando se reunió con los Grimaldi para acudir al funeral por Elizabeth-Ann de Massy, sobrina de Rainiero de Mónaco. Fue, concretamente, el 17 de junio de 2020. Desde entonces, la hermana de Andrea y Pierre Casiraghi ha pasado la mayor parte del tiempo en París, sin embargo, ha querido volver a Mónaco para apoyar a la hípica, un deporte por el que siente verdadera pasión y al que está estrechamente vinculada.

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Para la clausura del concurso de saltos, Carlota se decantó por vestido midi de manga larga de color blanco y negro con un estampado del logo de Chanel, que combinó con unas sandalias planas, además de un maquillaje muy natural y la melena suelta. Por su parte, su madre eligió un conjunto de color blanco roto con cinturón anudado a la cadera de la firma Halston, acompañado de unas sandalias de tacón en tono plateado. Una de las cosas que más han llamado la atención ha sido la nueva imagen de Carolina de Mónaco. Al igual que otras royals, como la reina Letizia, la hermana del príncipe Alberto ha decidido dejar de teñirse y lucir sus canas con orgullo. La Princesa siempre ha dado un valor muy importante a la naturalidad y no tiene problema en que el paso de los años también se refleje en su melena.

- Carolina de Mónaco también luce con orgullo sus canas

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