Muchas novias deciden prescindir del velo en su gran día porque consideran que se trata de un elemento demasiado clásico, que no termina de encajar con las chicas del siglo XXI. Sin embargo, cada vez son más los diseñadores que apuestan por recuperarlo. Rosa Clará explicaba que a ella los velos le gustan mucho. "Se puede colocar de mil formas, tener texturas muy diferentes… no tiene que ser el tradicional de siempre. Pero llevar algo de tul creo que le da un aura especial a la novia. Creo que termina el vestido". Una afirmación con la que coinciden otros muchos creativos que animan a las novias a que, por lo menos, se lo prueben.
Y es que no solo un vestido de corte clásico funciona con este complemento, y no todos son velos tradicionales. ¿Un buen ejemplo? La propuesta de la diseñadora Teresa Baena que, como se puede ver en la imagen, propone combinar un sencillo velo de tul liso con un conjunto de shorts y blusa para novia. Una apuesta arriesgada pero de lo más original.
Velo cubriendo el rostro
Llegar a la ceremonia velada o no es una elección muy personal de la novia en la que los diseñadores procuran no interferir. Y aunque no todas las chicas se atreven, algunas sí prefieren llegar a la celebración de este modo. En esta imagen de la colección Iconic de Beba's podemos observar que la firma propone un diseño de tul asimétrico –es un poco más largo por detrás–, ideal para cubrir el rostro de la novia sin que la elección resulte demasiado clásica.
Velo cubriendo el rostro
Para aquellas que busquen un diseño lleno de originalidad y que no pase desapercibido, desde Steven Khalil proponen un velo con detalles de pedrería. Si la pasada temporada las perlas se convirtieron en las protagonistas de un sinfín de velos, ahora cada vez gustan más los modelos con detalles que llenen de luz a la novia. Son ideales para vestidos sencillos y minimalistas.
VER: Alternativas al velo para novias que no quieren renunciar al tul
Velo corto
La longitud del velo puede variar en función de las necesidades y los gustos de cada novia. Aunque lo más común es que se extienda varios centímetros por encima de la cola, son muchas las que, por comodidad o simplemente gusto prefieren modelos más cortos. La propuesta de la imagen, de la firma nupcial Impúribus, propone un diseño corto y muy sencillo que se puede utilizar para cubrir el rostro. ¿El detalle que lo hace diferente? La cinta de raso que remata todo el bajo.
Velo corto
No es necesario que un velo corto se lleve con el cabello recogido en un moño o en una coleta; tampoco que se utilice para cubrir el rostro de la novia. Este tipo de diseños son ideales para combinar con vestidos vintage –como demuestra L'Arca– y funcionan especialmente bien con melenitas cortas. Ah, si quieres darle un toque todavía más personal, prueba a sujetarlo con una peineta de flores.
Con prendas sorprendentes
Teresa Baena no es la única diseñadora que propone mezclar un velo más o menos clásico con un look nupcial mucho más moderno y transgresor. Christopher Kane, por ejemplo, sugiere llevar un velo largo, con detalles de plumas en los extremos, de los que se extienden varios metros por el suelo, con un vestido corto con el que no todas las novias se atreverían. Una mezcla de opuestos que resulta totalmente acertada.
Con prendas sorprendentes
Si algo tienen de especial los diseños de la colección de 2020 de Helena Mareque es que no parecen dispuestos a dejar a nadie indiferente. La creativa, que siempre sorprende con propuestas llenas de fuerza y originalidad, propone dejar de lado los vestidos y lucir pantalones especiales, ideales para las novias que buscan algo diferente. Eso sí, la diseñadora propone darle un toque clásico al conjunto al incorporar un sencillo velo de tul de largo medio.
Un velo sencillo, distintas formas de llevarlo
Cuando Rosa Clará presentó su colección de 2020, eligió un buen número de velos para completar los estilismos de las modelos. Aunque la mayoría eran sencillos, sin apenas detalles, lo más llamativo fue la forma en que propuso llevarlos. Algunos nacían de una cinta que bordeaba las cabezas de las chicas; otros, se lucían como si fueran capas; y muchos, como el de la imagen, partían de una especie de turbante de encaje. Favorecedor, sencillo y sin excesos.
Velo con bordados
Aunque los diseños minimalistas parecen haber cobrado fuerza en los últimos meses, los diseños de encaje o con bordados elegantes y bonitos siguen teniendo un hueco reservado en las elecciones de novias y firmas. El diseño de la imagen, de la francesa Victoire Vermeulen es perfecto para lucir con vestidos sencillos y minimalistas que no se podrían englobar dentro de la categoría de clásicos. Una vez más vemos que un tocado o corona de flores puede ser el elemento que mejor funciona para sujetar con firmeza este etéreo complemento.
Velo con bordados
Lo mejor de estos modelos es que, como en el caso anterior, se pueden utilizar para dar un toque atemporal a los looks nupciales o, como en esta propuesta de María Baraza, para culminar un estilismo con un aire ligeramente clásico. Aunque hay quien apuesta por lucir este tipo de velos con peinados más o menos modernos en el mundo nupcial, como trenzas, si la novia no quiere arriesgar demasiado y acertar siempre, lo mejor es combinarlos con un moño sencillo que retire el cabello del rostro.