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¿Tu perro te muerde los pies, los pantalones o intenta quitarte las zapatillas cuando caminas? No te preocupes, es algo normal, sobre todo si es cachorro. Pero eso no quiere decir que debas aprobar esta conducta y fomentarla. Debes reconducirla para que sepa que puedes jugar con él de otra manera. Sin castigos, sin regañarle ni enfadarte con él, lograrás que deje de hacerlo sin castrar su comportamiento y sus instintos naturales. La veterinaria Beatriz Ardura, de AniCura Buenavista Hospital Veterinario, nos lo explica.

"Morder los pies es un acto bastante habitual en los cachorros, especialmente, que se acentúa en razas de carácter más inquieto. Se trata de un comportamiento asociado a muchos mamíferos depredadores recién nacidos que suele desaparecer con el tiempo. Los cachorros suelen comenzar a “practicar” el proceso predatorio desde que nacen, lo que les lleva a mordisquear, olfatear y abalanzarse contra todo lo que se mueve a su alrededor. Utilizan estos pequeños mordiscos como un juego para explorar y entrar en contacto con la realidad", aclara.

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Es más común en los cachorros

Cuando nuestra mascota madura, suele abandonar este comportamiento, sin embargo, "si no tratamos esta costumbre con la debida firmeza, es probable que, una vez alcanzada la edad adulta todavía sigan mordiendo nuestros pies, y esto podría llegar a convertirse en un trastorno de difícil solución e incluso peligroso", advierte. 

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No hay que regañarle 

Debido a que se trata de un comportamiento instintivo y natural no debemos enfadarnos con ellos. Se podría decir que para nuestros peludos es un juego y una manera de “entrenarse” para la vida diaria.

"En este sentido, la solución no pasa por prohibirlo sino por redirigirlo, por ejemplo, hacia un juguete. Tampoco debemos reñirle, pues no entenderá por qué no puede jugar. Lo mismo ocurre si realizamos aspavientos o forcejeos con nuestro cachorro, porque en esa resistencia es dónde encuentra la diversión, y es eso lo que busca tu perro, una presa que le oponga resistencia", señala la veterinaria. 

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Quédate quieta para que deje de morder 

Otra de las soluciones que aporta la especialista es que nos quedemo quietos para que deje de mordernos los zapatos, el pantalón o las zapatillas cuando andamos. "Cuando tu perro se lance a por tus pies mantén tus pies quietos, así verá que jugar con ellos ya no es tan divertido. Además, se aconseja no llevar cordones o ropa de la que pueda tirar con facilidad, pero, si esto ocurre lo mejor es no tratar de quitársela dela boca, ya que esto podría hacerle entender que queremos jugar con él", recomienda.

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Trata de ignorarlo 

La experta también nos propone dejar de prestarle atención mientras se comporte de este modo. "No le hables ni le regañes, así verá que no le muestras atención y no te interesa su juego y te soltará. Esto es muy importante, sobre todo para redirigir y evitar el mal aprendizaje que podría haber hecho tu perro, es decir, morderte para que le prestes atención", indica. 

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Propón un juego alternativo 

En muchos casos los cachorros muerden los pies porque necesitan canalizar su energía. Propón un método alternativo que le permita liberar su adrenalina.Y es que, como insiste la veterinaria, es un comportamiento normal en edades tempranas y no lo debemos reprimir, sino darle la oportunidad de que persiga, muerda y tire de objetos más adecuados, como un juguete, una cuerda, etc.

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Actúa rápido para evitar problemas de conducta

Para que tu perro deje de morderte los pies cuando caminas o cuando estás quieta, lo ideal es que dirijas su atención hacia otro tipo de juego o de actividad, ofreciéndole objetos para perros que puedan morder y que estimulen su inteligencia. Y, por supuesto, tener cubiertas sus necesidades de ejercicio, saliendo a pasear siempre que puedas. "Es otra manera de canalizar su energía. De esta forma le permitiremos que tome el aire y estire las patas. Si no lo hacemos puede que, además de morderte los pies, tu perro muerda su cama y todo lo que se encuentre a su paso".

Por último, hay que recordar, además, que es importante actuar lo antes posible. "De este modo, se evitarán problemas de conducta, algo que asegura una buena calidad de vida para la mascota y para el resto de la familia", concluye la veterinaria Beatriz Ardura, veterinaria de AniCura Buenavista Hospital Veterinario.

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