1. HOME /
  2. Moda

10 'tips' para cuidar tu ropa de baño

1/11 © Redes sociales

Cada verano, invertimos horas y horas de nuestro tiempo en encontrar el bikini o bañador perfecto. Ese que realce nuestra figura y nos haga sentir bien, guapas y cómodas. Una tarea complicada que podemos echar por la borda si, una vez encontrados, no sabemos cuidarlos adecuadamente. Con el paso del tiempo los tejidos se debilitan, y es que los agentes externos como el sol o el cloro pueden pasar factura al estado de nuestro traje de baño favorito, y aunque esto es algo inevitable, hay ciertas cosas que sí puedes hacer para conseguir que te duren más de tiempo en buen estado. A continuación de damos algunas claves sobre cómo lavarlo, secarlo, guardarlo...¡Toma nota!

Imagen: Instagram (@taylorswift)

2/11 © Getty Images

1. Antes de nada: Has encontrado el bikini perfecto y estás deseando estrenarlo. Pero antes de usarlo te recomendamos que lo pongas un poco a remojo con un poco de vinagre o agua con sal. De esta manera, ayudarás a que se fijen los colores y que te dure más tiempo. 

3/11 © Cordon Press

2. Presta atención al lavado: Aunque podemos meterlo en la lavadora -eso sí, sin usar suavizante y mejor dentro de una bolsa de tela para protegerlo del 'ataque' directo de los productos y de posibles enganchones-, lo mejor y lo más recomendable es que lo laves tú misma con agua fría (el agua caliente debilita el tejido) a mano y con un jabón neutro para eliminar las partículas de cloro, salitre o crema solar que se han quedado incrustadas en tu traje de baño. Si sólo lo has usado para darte un baño con enjuagarlo un poco con agua dulce será suficiente.

4/11 © Gtresonline

3. Secar a la sombra: El sol es uno de los grandes enemigos del color de tu traje de baño. Poco a poco, los rayos solares van aclarando y debilitando el color. Y no queremos que pase eso, así que lo mejor que puedes hacer para evitarlo es tras el baño, esperar un poco a que se seque bajo la sombrilla. Y, siempre, del revés. 

5/11 © Getty Images

4. Huye de la secadora: Tras el lavado, resulta muy tentador meter tu traje de baño en la secadora para que se seque más rápido. Un gesto que debemos evitar ya que destruye las fibras elásticas del bikini, y en su lugar secarlo al aire libre, sobre una superficia lisa y a la sombra, como te comentábamos en el punto anterior. Si vas a colgarlo de unas cuerdas con pinzas, fíjate bien dónde las colocas para evitar marcas o que el tejido se dé de sí. 

6/11 © Gtresonline

5. Nunca lo metas en una bolsa de plástico: Has estado bañándote en la piscina y llega el momento de volver a casa. Pero tu bikini aún no se ha secado. ¿Qué hacer? Aunque la tentación de meterlo en una bolsa de plástico es grande, debemos evitar hacerlo. La solución: escurrirlo bien y con cuidado y envolverlo en una toalla.

7/11 © Cordon Press

6. Cuidado al escurrirlo: Al hilo de lo anterior, escurrir las prendas de baño para eliminar el agua es uno de los gestos que más hacemos, y quizá no lo sepas, pero es una de las cosas con las que más precaución debemos tener. Es frecuente que, para escurrirlo, lo retuerzas. Debes evitar hacerlo, ya que de esta manera se da de sí y se deforma la prenda. Si además tiene detalles estampados o bordados podrían salir altamente perjudicados por esta torsión. Elimina el exceso de agua con mucho cuidado. 

8/11 © Cordon Press

7. Nunca guardarlo mojado. La humedad es el ambiente idóneo para la aparición de hongos y el olor que deja en los tejidos tampoco es muy agradable. Deja que se seque bien antes de meterlo en tu cajón o bolsa de playa, listo para su siguiente uso. 

9/11 © Cordon Press

8. Presta atención a dónde te sientas: Aparte de tener cuidado al aplicarnos la crema solar para que no roce el tejido, otro aspecto importante a tener en cuenta es dónde nos sentamos o con qué nos rozamos. Un gesto tan común como el de entrar y salir de la piscina por el bordillo puede estropear tu traje de baño debido al roce con la superficie áspera. También debes ser especialmente cuidadosa a la hora de sentarte a la orilla del mar, y no hacerlo mucho rato, ya que la arena se introducirá en el tejido y lo dañará.

10/11 © Cordon Press

9. No planchar. El material de estas prendas es muy sensible al calor y podrías destrozarlo dadas las altas temperaturas que alcanza la plancha. También sería un error si tiene laminados o detalles cosidos. Conclusión: no planchar bajo ningún concepto. 

11/11 © Gtresonline

10. Guardarlo al final de la temporada: Es uno de los puntos más importantes porque la manera de guardarlo influye mucho en el estado de tu prenda de baño. Si quieres encontrártelo en buen estado el verano siguiente hay ciertas cosas que deberías tener en cuenta: no lo guardes de cualquier manera y, antes de hacerlo, lavalo a mano con agua tibia y después darle un segundo lavado en la lavadora sin suavizante y con un ciclo para prendas delicadas (metido en una bolsa de tela). Tras ello, y cuando esté seco del todo, guárdalo en una bolsa de cierre hermético o de tela suave para proteger la prenda de la humedad.

Más sobre: