La crema que necesitas según tu tipo de trabajo

¿Oficina o exterior? ¿De pie o sentada? Descubre cómo afecta tu empleo a tu piel y tu cabello, y cómo cuidarlos mejor

Por Amaia León

Seca, grasa y mixta; apagada o con manchas; con tendencia acneica o deshidratada... Ni todas las pieles son iguales, ni todos los cuidados son igual de necesarios. Posiblemente utilices ciertos cosméticos en función de tu tipo de cutis, pero hay otro factor que también afecta (y mucho) a la piel y puedes estar pasando por alto: tu trabajo. Igual que el tipo de tareas y el ambiente determinan la forma de vestir en cada puesto -algo especialmente interesante de conocer cuando te preparas para la entrevista de selección-, esos factores también condicionan tu ritual de belleza. Aparte del generalizado estrés, que puede provocar acné adulto, anvejecimiento acelerado, deshidratación y tono irregular en tu piel, cada empleo somete a tu cuerpo a diferentes exigencias, así que deberías utilizar cremas específicas para combatirlos. ¿Sabes cuál es el mayor problema que produce tu trabajo y, sobre todo, cómo mitigarlo?

- Trabajos de oficina 
El lugar donde trabaja la gran mayoría... es posiblemente el más perjudicial. El aire acondicionado o la calefacción, que resecan piel y cabello, y la luz azul de las pantallas, que acelera el envejecimiento, son los principales agresores, y una combinación pésima, como alerta el cosmetólogo Pedro Catalá, fundador de Twelve Beauty. "Hay estudios que demuestran que una exposición prolongada al aire acondicionado (tanto frío como caliente) seca profundamente la piel y la hace más propensa al envejecimiento”, explica. Las opciones para cuidar la piel en estas circunstancias son prácticamente infinitas, aunque el objetivo principal siempre debe ser frenar y reparar arrugas, manchas, flacidez y otras consecuencias del paso del tiempo en el rostro. Puede elegirse una crema hidratante antiedad convencional y combinarse con la acción intensiva de productos como Advanced Night Repair Eye Supercharged Complex Synchronized Recovery de Estèe Lauder, un contorno de ojos especialmente indicado para combatir los efectos de la luz azul. Por otro lado, también el cuerpo debe cuidarse de forma especial porque, al estar tanto sentada, es habitual que aparezca más celulitis y retención de líquidos. 

- Médico, enfermera y profesionales sanitarios
Lavarse las manos constantemente, como exigen estos empleos, puede secarlas y agrietarlas. La crema de manos es un básico sin el que muchas sanitarias no pueden vivir, pero no todas son igual de efectivas. Las fórmulas con ingredientes reparadores, como la manteca de Karité de la crema de L'Occitane en Provence, o de farmacia, como Euceri pH5 o Vichy crema de manos y uñas, son grandes clásicos, y también existen innovadoras fórmulas que, además de hidratar, ralentizan el envejecimiento de esta zona tan delatadora. Por ejemplo, la Crema deliciosa para manos y uñas de Caudalie, con polifenoles antioxidantes.

- Profesora, peluquera, dependienta y otros puestos de pie
Pasar 8 horas, o más, de pie ralentiza la circulación de retorno. En consecuencia, las piernas se hinchan y son más propensas a las varices. Por eso, además de utilizar las recomendables medias de compresión, quienes trabajan así deberían aplicarse cada noche una crema específica para favorecer el torrente sanguíneo y evitar la fatiga, como Reductor Drenante Piernas de Somatoline o Actidren de Elifexir.

- Pilotos y azafatas
El jet lag no es lo peor a lo que deben enfrentarse los tripulantes de los aviones o las personas que viajan mucho: el ambiente ultra seco de las cabinas también afecta a la piel, según explica Paola Gugliotta, co-creadora y directora de Sepai y Apoem. “A los cambios de presión atmosférica hay que añadir el brutal descenso de la humedad ambiental que deshidrata la piel”. Su prioridad será por lo tanto mantener rostro y cuerpo muy bien hidratados con cremas específicas y de textura densa, como Beurre Corporel de Biotherm y Crème Nourrissante Hydratation Fraicheur de la línea Dior Hydra Life, o en óleo, como Calm Rose Hip Oil de Apoem. También el cabello se resecará, así que no está de más incrementar el uso de mascarillas.

- Trabajos al aire libre
Protegerse del sol es un cuidado básico para cualquiera, pero absolutamente imprescindible en el caso de quienes trabajan en exteriores, para evitar enfermedades de la piel y también porque se ha demostrado que el 80% del envejecimiento lo produce la luz solar. Un fotoprotector con color, como la Crema solar facial con color SPF30 de Apivita, es una alternativa muy cómoda para el día a día, aunque si ya es demasiado tarde y tienes manchas, necesitarás combinarlo con un tratamiento para unificar tu color, como el dúo de Sesderma que une la acción despigmentante del sérum Azelac Ru Liposomal con la luminosidad que consigue el fluido C-vit Radiance. 

Más noticias sobre:
Últimas Noticias