Por casualidad y cuando apenas tenía 15 años. Así comenzó su carrera en el mundo del modelaje Eduarda Novoa. Nacida en Recife, una ciudad costera en el nordeste de Brasil, fue uno de sus tíos quien apostó por ella en su agencia de modelos. El apoyo de su familia y un destino llamado a triunfar le aseguraron el éxito en una profesión en la que ya lleva una década.
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“He vivido en ocho países diferentes y una de mis experiencias más intensas fue cuando me fui a vivir a Asia, apenas cumplidos los 16. Estuve un año entero allí sin volver a casa”, relata la modelo sobre una etapa que considera clave para su crecimiento personal y profesional.
Entre campañas y shootings, saca tiempo para disfrutar de sus amigas y estudiar Diseño de Interiores, una de sus grandes pasiones, que ahora ha decidido llevar a otro nivel.
A la hora de vestirse, encuentra inspiración en Kate Moss o las icónicas Jane Birkin y Carolyn Bessette-Kennedy. “En la actualidad, adoro el clasicismo impecable de Kelly Rutherford. Y si pudiera cambiar de armario por un día, me quedaría con el de Elsa Hosk para el día y con el de Zendaya para una night out”.
