El 17 de septiembre es una fecha que muchas tenemos marcada en el calendario. No solo comienza Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, sino que además se estrena el esperadísimo episodio final de El verano en que me enamoré. La serie basada en las novelas de Jenny Han que desde 2022 (o hace unas semanas, si eres de las que se ha enganchado, precisamente, este mismo verano) tiene a más de 25 millones de espectadores divididos entre team Conrad o team Jeremiah, los hermanos Fisher que han ocupado el corazón de Belly de forma alternativa.
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La serie se ha convertido en un auténtico fenómeno, ocupando lo más visto de Prime Video cada semana y catapultando a su protagonista a la fama. Es Lola Tung (22) quien da vida a Isabelle Belly Conklin, en el que ha sido su primer trabajo frente a la cámara. Y, desde luego, no será el último: se embarcará a finales de este año en el rodaje de la película de terror The Young People, un registro totalmente opuesto al de la chica que veranea en Cousins.
Pero no es la única diferencia que Lola Tung presenta con Belly: también el estilo de ambas es radicalmente opuesto. En un 2025 en el que las actrices han explotado en la alfombra roja el method dressing, con looks que hacen guiños a los papeles que interpretan, esta neoyorquina decidió desde el principio que sería su propio estilo el que reinase en cada evento al que asiste.
Y no, no tiene nada que ver con los vestidos florales o los juveniles conjuntos con camisetas cropped que luce en la ficción.
A Lola nunca la veremos repetir look
Comenzó colaborando con firmas como American Eagle durante la promoción de la primera temporada de la serie y ha terminado la tercera formando parte de la lista de amigas VIPS de sellos como Balmain, Dior o Chanel.
"Ahora tengo acceso a mucha ropa que antes no me podía permitir y a firmas con la que pensaba que era imposible trabajar. Me siento muy afortunada", revelaba la intérprete al portal Fashionista. "Me ha hecho estar más dispuesta a probar cosas distintas. Siempre me ha gustado experimentar y que algún elemento de mis looks fuese un poco funky, artístico o edgy. Esto me ha impulsado a ir aún más lejos".
El hada madrina que le ayuda a experimentar con sus rompedores outfits, es la estilista Britt McCame. Ha sido ella quien ha confesado que la actriz odia repetir conjunto, pues le gusta sentir que en cada evento lleva algo totalmente diferente al anterior. "Hicimos un look en rojo y ahora nunca más podemos volver a usar ese color", bromeaba durante una entrevista.
París como punto de inflexión (igual que con Belly)
Su primer viaje a la semana de la moda parisina fue, en sus palabras, "un gran hito". Allí se atrevió con un conjunto muy holgado en color rojo, con estampado de lunares y botas altísimas, un look que confesó que jamás habría imaginado llevar, pero que terminó siendo uno de sus favoritos. "No me arrepiento en absoluto", ha asegurado tiempo después, recordando con cariño su debut en el front row francés.
Moda vintage
Hemos visto a Lola Tung y a su estilista seguir la misma estrategia de otras veinteañeras de éxito, como Olivia de Rodrigo o Sabrina Carpenter: rescatar diseños de archivo que después acaparan titulares. Ha lucido este verano en Nueva York piezas tan icónicas como aquel minivestido estampado de John Galliano para Dior, que formaba parte de la colección Primavera/Verano 2004.
Y aunque es una auténtica it girl a la que las firmas desean hacer hueco en el front row de sus desfiles, la intérprete no siempre encuentra inspiración en el lujo, sino en el armario de su madre, donde admite que le encanta bucear entre su ropa antigua.
Recurre siempre al básico que todas llevamos: los vaqueros
"Mi estilo es un poco funky, con un toque setentero y lo que me apetece llevar en ese momento, según el día. Cambia, pero mi corazón está en cada outfit. Llevo muchos vaqueros, camisetas, sudaderas y zapatillas", admitía a Fashionista. "Me encantan unos buenos jeans: acampanados, anchos… cualquier silueta cómoda".