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Cada vez nos gustan más las casas abiertas y diáfanas, sin tabiques que compartimenten el espacio en exceso. Si es tu caso y tu vivienda tiene ambientes continuos sin muros que los dividan, entonces seguro que te interesa el proyecto que te explicamos a continuación. Un separador de espacios que es, además, el expositor de plantas perfecto. ¡Toma nota!

 

¿Separar espacios o no?

Aunque amamos las casas diáfanas, desde los primeros lofts neoyorquinos que nos emocionaban hace décadas, lo cierto es que en este tipo de casas de concepto abierto (open concept) es importante modelar el espacio de alguna manera.

Por eso, a veces se necesitan separadores que nos ayuden a definir diferentes zonas de uso, sin tabiques fijos e inamovibles. Los paneles divisores, ya se trate de biombos o de cualquier otro elemento, no son definitivos lo que nos permite cambiar las cosas fácilmente cuando lo necesitamos. Hoy vamos a aprender a construir un módulo para dividir ambientes de lo más original.

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El poder decorativo de las plantas

Plantas y flores tienen una gran capacidad para decorar cualquier rincón de tu casa. Desde el salón al dormitorio, pasando por la cocina o, incluso, el cuarto de baño, cualquier estancia es perfecta para acoger algunos ejemplares vegetales que pongan un toque verde.

Y no solamente son decorativas, sino que las plantas ofrecen otras ventajas, por lo que es interesante hacerles un hueco en casa. Hay ciertas especies que purifican el ambiente eliminando del aire sustancias perjudiciales. Además, aportan frescor y son capaces de mejorar nuestro estado de ánimo. ¡Pruébalo!

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Un trabajo con madera

Los proyectos de carpintería suelen ser muy apreciados por los amantes del bricolaje. Puede ser porque construir algo para nuestra casa con madera es una actividad de lo más satisfactoria.

Para hacer este separador-expositor de plantas necesitarás los siguientes materiales: dos tableros de contrachapado grandes (1200 X 400 X 15 mm), dos tableros de contrachapado más pequeños (100 X 400 X 15 mm), listones cuadrados, escuadras metálicas, cuatro ruedas para muebles, tornillos de cabeza redonda, tornillos avellanados, pintura acrílica blanca, cola para madera y hembrillas metálicas abiertas de tamaño grande.

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Las herramientas necesarias

Para llevar a cabo este proyecto sencillo de carpintería necesitarás algunas herramientas eléctricas que seguro que tienes en casa: una sierra pequeña, una multilijadora y un taladro/destornillador. También te hará falta papel de lija de grano 120 para la multilijadora, un juego de puntas de destornillador y una broca para madera.

Además, hazte con un juego de abrazaderas o sargentos, una brocha plana y un rodillo de espuma para pintar el expositor, lápiz, metro y una regla de escuadra.

Un consejo: si estás empezando a realizar proyectos DIY de carpintería y todavía no dispones de algunas de las herramientas eléctricas, puedes alquilarlas en centros especializados. Sin embargo, cuando hayas terminado el trabajo, habrás disfrutado tanto que merecerá la pena que vayas de compras y adquieras estas herramientas, tan comunes para este tipo de proyectos.

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Paso 1. Construye la base del separador de ambientes

Lo primero que tendrás que hacer es ensamblar los tableros que van a formar parte de la estructura de base del panel. Une las tablas pequeñas laterales a uno de los tableros más grandes. Para hacerlo aplica cola para madera y sujeta las piezas con las abrazaderas. Después fíjalas atornillando las escuadras metálicas. De esta forma la estructura quedará muy estable.

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Paso 2. Coloca la tabla superior

El siguiente paso consiste en fijar la tabla grande superior sobre la estructura que acabas de montar. Colócala en su sitio y fíjala con tornillos avellanados. Ten cuidado al atornillar los laterales: calcula bien el punto donde has de poner los tornillos, ya que las tablas son estrechas.

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Paso 3. Lija la superficie

Una vez hayas construido la base del separador es el momento de lijar la superficie hasta conseguir que quede suave al tacto. Utiliza una lija de grano 120 e insiste en los bordes de las tablas de contrachapado, que es donde pueden quedar astillas de madera. Después limpia la madera con un trapo húmedo para retirar el polvo resultante del lijado.

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Paso 4. Cortar los listones

Ahora que ya tienes lista la base de la estructura llega el momento de cortar los listones de sección cuadrada. Hazlo con la sierra calculando previamente la medida adecuada. Necesitarás dos listones más largos para fijar a los laterales (de aproximadamente 178 cm) y uno más corto transversal para la parte superior (de 136 cm más o menos). Lija los bordes de los listones.

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Paso 5. Fijar los listones de madera

Taladra agujeros en los listones más largos y atorníllalos a la estructura con ayuda de una regla de escuadra para conseguir que queden exactamente en el centro y bien rectos. Fija un listón a cada lado y después el transversal en la parte superior. ¡Ya tienes construido el separador-expositor!

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Paso 6. Pon las ruedas y decora el separador

El último paso de este proyecto consiste en fijar las ruedas en la base del separador. Se atornillan en las esquinas, las cuatro a la misma distancia del borde exterior.

A continuación, pinta el separador para decorarlo a tu gusto. En este caso se han aplicado dos capas de pintura acrílica blanca con un rodillo de espuma y una brocha plana, pero puedes emplear el color que prefieras. Inserta en el listón transversal las hembrillas abiertas que funcionarán como ganchos para colgar los maceteros con las plantas.

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