Una buena idea para aprovechar el tiempo que vas a pasar en casa es poner en orden tus estanterías, ya que normalmente, en el día a día, colocas los libros nuevos donde encuentras hueco y los adornos en la balda libre. Estos consejos te ayudarán a organizar tu biblioteca en 10 prácticos pasos.
1. Empezar de cero
Lo sentimos, aunque te parezca que más o menos tu estantería está organizada si no has hecho ‘limpieza general’ y eres una compradora habitual de libros no podemos dar por válido tu supuesto orden. No estamos hablando de quedarnos únicamente con 30 ejemplares, como aconseja Marie Kondo, sino de ser realista y echar un vistazo a tus estantes de manera objetiva: ¿de verdad ese superventas que nunca leíste merece un sitio de honor?
2. Establecer una estrategia
Primero vacía tu biblioteca y coloca todos los ejemplares y adornos en el suelo. Aprovecha para dar o donar todo aquello que hace bulto, no has leído o no vas a leer nunca y clasifica en montones según el método que vayas a emplear: por géneros, orden alfabético... Así tendrás una visión de conjunto, que te facilitará la distribución de las baldas, permitiéndote adecuar el espacio al número de ejemplares. No olvides dejar más hueco libre en tus secciones favoritas (negra, romántica, autoayuda…), para que entren tus nuevas adquisiciones sin problema.
3. Hora de limpiar
Y no nos referimos solo a limpiar a fondo las baldas con un trapo húmedo y eliminar las telarañas de los techos, sino también a los libros. La aspiradora y el plumero están prohibidos, ya que la primera puede dañarlos y el segundo solo traslada el polvo de lugar. El atrapapolvo, hay modelos de un solo uso, es tu mejor aliado en esta tarea, ya que además de eficaz, como es en seco, no perjudicará ningún ejemplar, ni siquiera los más delicados. Un consejo: si vas a limpiar la estantería llena, no olvides empezar de arriba abajo, para ir más rápido y no ensuciar de nuevo lo que ya está limpio. Para terminar, aspira el suelo de alrededor para eliminar todo lo que se haya caído.
4. Colocar adecuadamente
Una vez establecida la estrategia a seguir (categorías, temas y orden alfabético son las más usuales) debes jugar con los colores y los tamaños, para conseguir un resultado tan práctico como bonito, como el de esta propuesta de Rimadesio (en Iconno). Para que transmita mayor sensación de orden, procura crear distintas gamas cromáticas, que combinen o contrasten, según prefieras, y coloca los ejemplares de mayor a menor o al revés, evitando en lo posible el ‘efecto gráfico de barras’.
5. Rellenar huecos
Si te sobran los libros, estás de enhorabuena porque una estantería llena te hará pensar en bibliotecas famosas, como la Pública de Sttutgart (Alemania) o la George Peabody de Baltimore (Estados Unidos), y en las librerías más bonitas del mundo, como el Ateneo Grand Splendid (Buenos Aires), la Lello e Irmâo (Oporto) o la Bardón (Madrid). Eso sí, siempre con sentido común y lógica, teniendo en cuenta el lugar en el que se encuentra. Es decir, si tu salón es minimalista y poco recargado, deberás respetar ese estilo también a la hora de organizar tus libros, tal y como ha hecho la diseñadora Inés Benavides.
6. Dejarte llevar
Seguir un orden no significa caer en la rutina ni en el aburrimiento. Sé atrevida, huye de lo clásico y da un giro a tu biblioteca colocando, por ejemplo, los ejemplares al revés, es decir, en horizontal en lugar de en vertical. El límite siempre está en el sentido común y el buen gusto.
7. Integrar elementos decorativos
Porque no solo de palabras vive tu biblioteca también lo hace de adornos, marcos con fotografías, recuerdos de tus viajes… Son esas pinceladas ‘deco’ las que aportarán un toque de color y un plus de personalidad, además de dejar que el mueble respire y se vea menos abarrotado visualmente. Las plantas y los jarrones con flores son indispensables. Procura, eso sí, no poner demasiados objetos llamativos.
8. Apostar por la mezcla
Para que tu librería resulte verdaderamente apasionante, además por supuesto de por sus libros, debe de ser bonita y tener carácter. Para conseguirlo, combina objetos diferentes y juega con las formas y los materiales de tus adornos, manteniendo siempre cierto equilibrio visual. Evita poner demasiadas cosas pequeñas y aprovecha el momento para rellenar huecos vacíos.
9. Adaptarla a cada estancia
Según la estancia en la que se ubique, tu biblioteca precisará un orden y una decoración diferente. En el dormitorio, por ejemplo, deberás tener más a mano los libros pendientes de leer y los de yoga o meditación, especialmente en estos momentos en los que tu casa se ha convertido en sala de ‘fitness’, y en la cocina, los de recetas tanto para el día a día como para ocasiones especiales. En ambos espacios, debes incorporar elementos propios de estas habitaciones: fotografías de moda, hierbas aromáticas, accesorios de diseño, como el Juicy Salif de Philippe Starck.
10. Mantenimiento incluido
Tan importante como organizar todo adecuadamente es mantenerlo así el mayor tiempo posible. Para ello, debes ser siempre ordenada. De manera que, si coges un libro, lo vuelvas a colocar en el mismo lugar, o evitando dejar las llaves o el móvil en el estante que tienes a mano, porque una vez que abras la ‘veda’ de utilizar tu estantería como vacía-bolsillos, todos la usarán con el mismo fin. Y para que el polvo no se acumule, procura limpiarlo una vez a la semana o al menos cada 15 días.