Ya hace más de un mes desde que el pasado 26 de diciembre, cuando un maremoto destruyó lo que hasta ahora había sido uno de los destinos turísticos más paradisíacos de todo el planeta. Pasa el tiempo, pero la ayuda sigue siendo tan necesaria como el primer día. Por este motivo, también el mundo de la cosmética ha querido solidarizarse con los países de la zona, en especial con los niños, sin duda las víctimas más débiles de esta catástrofe.