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Las cualidades organolépticas de los refrescos de cola hacen que mariden bien con ciertas carnes como las de cordero o cerdo.
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Mucho es lo que se ha escrito sobre los posibles maridajes entre los distintos alimentos y recetas y las diferentes variedades de vino (desde el clásico y algo obsoleto ‘tinto para carnes y blanco para pescados’ hasta otras combinaciones más arriesgadas). Sin embargo... ¿se ha parado a pensar con qué platos o productos gastronómicos marida mejor cada refresco?
Y es que, efectivamente, estas bebidas también cuentan con sus combinaciones más y menos acertadas. Algo lógico si tenemos en cuenta que cada refresco posee una fórmula muy estudiada que da lugar a unas determinadas cualidades organolépticas: los aromas, los sabores, la textura de la bebida, la presencia o no de gas o de azúcar, la persistencia aromática en el paladar, etc. Estos son, según ANFABRA (Asociación Nacional de Fabricantes de Bebidas Refrescantes Analcohólicas) los mejores maridajes en función del tipo de refresco:
COLA
La cola remite a una gastronomía de sabores potentes. Su dulzor acaramelado y su capacidad para estimular la percepción a través de su acidez, así como la propiedad del gas carbónico de limpiar las papilas gustativas antes del siguiente bocado, la hacen compatible con:
-Cordero (piernas rellenas de frutos secos, cordero asado...). -Carnes rojas a la parrilla. -Cerdo: jamón al horno, cochinillo asado. -Aves: foie, patés especiados. -Ahumados de pescado: salmón, arenques.
NARANJA
Por su predominio del dulce sobre lo ácido, sus fuertes notas cítricas y su capacidad para mostrarse compatible con sabores fuertes, puede ofrecer un buen resultado con:
-Vinagretas con miel. -Elaboraciones con cilantro. -Rábano dulce (Daikon). -Especias fuertes: curry, paprika, especias chinas. -Ensaladas: hojas de roble, lollo rosso, achicoria. -Postres de frutas.
LIMÓN
Posee una fresca acidez, así como toques cítricos de limón que la identifican y la fortalecen a la hora de enfrentarse a sabores intensos. Por todo ello, armoniza con:
-Pescados fuertes: cabracho, cangrejo, etc. -Vinagres balsámicos, vinagre de Módena. -Brotes de apio. -Salsas (mahonesa, mostazas...). -Dulces consistentes con jengibre: galletas, bizcochos. -Postres de fruta.
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