Esta misma tarde ha fallecido Enriqueta Rodríguez Figueredo, la abuela materna de doña Letizia, en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid. La Princesa de Asturias ha suspendido todos los actos que tenía previstos para mañana. Tanto la fallecida como su marido, Francisco Rocasolano, han estado viviendo durante los últimos años en casa de su hija Paloma debido a su avanzada edad y delicado estado de salud. Son momentos difíciles para la familia materna de doña Letizia, quien estaba muy unida a sus abuelos cuya presencia en la casa que los Príncipes tienen en el recinto del Palacio de la Zarzuela era de lo más habitual.
Además, doña Letizia había vivido con ellos mientras era estudiante en el Instituto Ramiro de Maetzu de Madrid. Posteriormente, y coincidiendo con la jubilación de Francisco, la pareja se trasladó a vivir a Alicante, donde residieron durante quince años, primero en Torrevieja y después en el barrio de San Gabriel a las afueras de la ciudad. Fue aquí donde muchos veranos doña Letizia acudía a pasar unos días junto a su familia en la playa.
Caracterizada por una exquisita discrección, pocos detalles más se conocen acerca de Paloma Rocasolano y su familia más próxima. Tan sólo que tiene un hermano que trabaja como chófer en el Parlamento Europeo de Bruselas.
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