Si cuentas con una habitación extra, por pequeña que sea, y hay pequeños en casa, quizá convertirla en cuarto de juegos sea la mejor decisión para todos en casa. Los niños tendrán un espacio en el que jugar, leer, saltar, dibujar… y los mayores estarán tranquilos porque ese espacio está adaptado a ellos. Además, aligeras el espacio de descanso al no tener que organizar juguetes en él.
¿Cómo montar y decorar un cuarto de juegos para niños?
Lo primero que debes pensar es en que resulte un lugar seguro. Nada de muebles de demasiada altura y todos perfectamente fijados a la pared, evita esquinas o protégelas, evita elementos o materiales cortantes. Y después has de tener en cuenta que haya espacio de almacén. Los muebles y contenedores te ayudarán a mantener en orden el cuarto de juegos. Pero siempre a la altura de los niños para que sean ellos quienes ayuden a recoger.
Además, piensa en que los colores sean alegres y dinámicos para crear un espacio divertido. Aunque no significa que tengan que ser estridentes. El blanco y los neutros también dan buen resultado. Los tonos empolvados -como los de la imagen- son una elección intermedia muy acertada.
Y ten en cuenta que debes crear tantos rincones como te permita el espacio: zona de lectura, mesita para pintar, pizarra, espacio para rompecabezas, para construcicones…
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