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¡Unas Navidades muy distintas! José María Gutiérrez (47), ‘Guti’, y Romina Belluscio (44) han dejado atrás el frío de Madrid para pasar los últimos días de este 2023 en un destino de lo más paradisíaco: Maldivas. Un viaje que el matrimonio está disfrutando junto a los pequeños de la casa: Enzo y Romeo, de diez y dos años respectivamente, que han dado un gran estirón. Unos días de desconexión en los que están haciendo todo tipo de planes juntos como jugar con la arena a la orilla de las cristalinas aguas del océano Índico o recorrer los encantadores rincones de la isla en bicicleta.
Sin duda, comerse las uvas en bañador es todo un placer y más si se tiene en cuenta que dejan atrás 12 meses muy complicados en los que la modelo de origen argentino ha tenido que hacer frente a la dura enfermedad de Lyme. Se trata de una patología que se adquiere por la picadura de una garrapata y que afecta a la vida cotidiana del paciente con síntomas como fiebre y dolores musculares.
Por fortuna, y tras muchos años visitando a todo tipo de médicos, la presentadora ha conseguido recuperar las riendas de su vida gracias a un tratamiento, pero ha querido aprovechar su experiencia y su altavoz como figura pública para dar más visibilidad a este padecimiento. “Fue una época de mucha oscuridad porque no sabía lo que tenía”, confesó en una entrevista en exclusiva con ¡HOLA!
En esa misma conversación, Romina también contó que el cariño y el apoyo incondicional del que fuese jugador del Real Madrid y de sus niños ha sido vital para su mejoría. Por este motivo, no es de extrañar que su mayor deseo para el año que está a punto de comenzar sea la salud, tanto para su familia como para su extensa comunidad de seguidores. “Felices fiestas a todos. Os deseamos un feliz 2024 desde Maldivas. Mucha salud para todos de corazón”.
Sin embargo, este 2023 también ha brindado a Romina y Guti un motivo para sonreír: el nacimiento del pequeño Hugo en abril, el primer nieto del deportista fruto de la relación de su hija mayor Zayra con Miki Mejias. A pesar de que el comentarista ha explicado que no le gusta que le llamen abuelo, se le cae la baba con el niño con el que se reúne siempre que su agenda de compromisos profesionales se lo permite.
Guti, feliz con su nieto en una fiesta familiar disipando rumores de distanciamiento con su hija
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