El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y su mujer se separan tras dieciocho años casados y tres hijos en común

Una de sus últimas apariciones públicas fue durante la coronación de Carlos III, a la que llegaron cogidos de la mano

Por Carla Calvo

El mes de agosto ha comenzado con una inesperada separación: la de Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, y su esposa Sophie Grégoire. Tras dieciocho años de matrimonio y haber formado una bonita familia numerosa junto a los tres hijos que tienen en común, la pareja ha anunciado públicamente su decisión de emprender caminos por separado. El mandatario, de 51 años, y la que fuera reportera de televisión, de 48, han emitido un comunicado para informar a quienes les siguen de su situación sentimental y de los pasos que han dado para iniciar una nueva etapa de forma independiente.

El álbum del viaje de Trudeau y su familia a la India que tanto dio que hablar

Después de dos décadas de incondicional amor y traer al mundo a sus tres hijos, Justin y Sophie han tomado la determinación de desvincularse a nivel sentimental, una separación que llega "tras muchas conversaciones profundas y difíciles". Así lo han anunciado ambos este miércoles 2 de agosto a golpe de notificación a través de sus respectivos perfiles sociales, un texto que han emitido tanto en inglés como en francés: "Hola a todos. Sophie y yo queremos compartir que, tras muchas conversaciones profundas y difíciles, hemos tomado la decisión de separarnos. Como siempre, continuaremos como una familia muy unida con un profundo amor y respeto el uno por el otro y por todo lo que hemos construido y seguiremos construyendo", reza el breve texto publicado por Trudeau, que es el mismo que ha compartido su exesposa. Además han pedido expresamente respeto por su privacidad y la de sus niños, Xavier, de 15 años, Ella-Grace, de 14, y Hadrien, de 9. 

Después del anuncio, la oficina del primer ministro de Canadá ha señalado que la expareja ha "firmado un acuerdo de separación" para garantizar que se han seguido "todos los pasos legales y éticos con respecto a su decisión", una línea que pretenden seguir en el futuro por el bienestar de la familia.

La historia de amor del mandatario, que el próximo mes de noviembre cumplirá ocho años al frente del país norteamericano, y la excomunicadora se remonta a su infancia, cuando tuvieron su primera toma de contacto. Ambos estudiaron en el mismo colegio, una escuela ubicada en Montreal, aunque no iban a la misma clase, pues ella compartía curso con el hermano pequeño de Justin, quien desafortunadamente falleció en 1998 durante una avalancha. Después perdieron el contacto y no fue hasta 2003 cuando se reencontraron en una gala benéfica donde intercambiaron miradas y sintieron un irrefrenable flechazo. A partir de entonces, se volvieron inseparables: en 2004 se comprometieron, al año siguiente sellaron su amor ante el altar en una romántica ceremonia en Montreal y después ampliaron la familia.

Tal y como ella misma reveló en una entrevista que concedió a Women on the Fence, desde aquella preciosa coincidencia Justin tuvo claro que era la mujer de sus sueños: "En la primera cita me miró a los ojos y me dijo: ‘He estado esperándote 31 años. Vas a casarte conmigo. Vamos a formar una familia”, contó. El pasado mes de mayo, con motivo del Día de la Madre, él se refirió a ella como una de las personas más "fuertes, valientes y fantásticas" que había tenido el placer de conocer.

Una de sus últimas apariciones públicas en un compromiso oficial fue durante la coronación de Carlos III, hace escasos tres meses, en la que se mostraron cómplices y unidos a su paso por la abadía de Westminster, donde caminaron radiantes y cogidos de la mano.