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La vida de luces y sombras de Isabel Pantoja ha marcado profundamente a su hija Isa. La joven habló en el último episodio de Lazos de Sangre, programa de Televisión Española, sobre la vida de la artista, sobre su relación con su madre y las carencias que ha tenido debido a su profesión y éxito. Isa Pantoja comenzaba tratando la estancia en prisión de la intérprete. "Me provocó un shock ver que mi madre iba a ir a la cárcel. En casa aún nos cuesta pronunciar esa palabra. Pero es una realidad en sí, ya ha pasado y no me cuesta hablar de ello. Lo pasé muy mal, hay imágenes muy desagradables y eso marca a cualquier persona", decía la joven, recordando el que probablemente haya sido el capítulo más amargo de la familia Pantoja. "En ese momento yo con mi hermano no me hablaba. Me fui con Dulce a Londres y espabilé, eso me ayudó a superar mi trauma. Fui a verla muy poco. Como estaba fuera tampoco me enteré de mucho, porque no ponía la tele", añadía.
Esos años no fueron fáciles para la joven, que pronto cumpliría la mayoría de edad y decidiría rebelarse debido a la sobreprotección que existía en su casa. "Me escapé al cumplir 18 años. Tenía tanta sobreprotección que necesitaba escapar. Prefería estar en el internado a estar en Cantora. Pocas veces hemos tenido una conversación de mujer a mujer. Cuando le dije que estaba embarazada se lo tomó mejor de lo que esperaba", explica.
Pero sin duda, lo más difícil para Isa fue recordar la ausencia de su madre durante su infancia. "Me hubiera gustado pasar más tiempo con ella. Ahora que soy madre noto mucho más lo que no estuvo conmigo. Nunca podía ir a ningún sitio, yo siempre estaba al cuidado de Dulce, ella acudía a todos los festivales, hacía los deberes conmigo… Dulce me castigaba y mi madre me premiaba, ella era la buena", decía. "Cuando empezó a salir con Diego Gómez, yo estaba celosa porque no pasaba tiempo conmigo por trabajo y cuando estaba en casa, en vez de hacerme caso a mí se lo hacía a él. Con Julián fue muy feliz, se le notaba muchísimo. Yo le sigo teniendo mucho cariño, a pesar de todo. Nos llevábamos muy bien y mi madre se enfadaba a veces, porque él era mi cómplice. A él sí fui una vez a verle a la cárcel", añadía recordando las relaciones sentimentales de la cantante.
"Creo que mi madre tiene depresión desde que entró en prisión, aunque realmente creo que no es feliz desde que se murió Paco. Me gustaría verla feliz, verla contenta", comentaba hablando del gran amor de Isabel, el torero Francisco Rivera 'Paquirri'. "En Cantora está todo como lo dejó él y yo siento su presencia a veces. Siempre se habla de él, está presente en muchas conversaciones", asegura. "A mi hijo Alberto le gustaría ser torero, como su abuelo. Él sabe lo que le pasó y te cuenta cómo le cogió el toro y que ahora está en cielo... Mi madre en 35 años no había vuelto a vídeos de Paco, porque creo que aún no lo ha superado; ahora lo hace por mi hijo. Tienen una complicidad que yo no he tenido nunca con ella y él me ha acercado mucho a mi madre", explica.
Durante el documental también se habló del momento en el que la artista viajó a Perú en el año 1996 para adoptarla, algo de lo que ella no fue consciente hasta mucho tiempo después. "Me contó que me había adoptado como si fuera un cuento porque en el colegio empezaron a decir cosas después de que saliese en un programa de televisión. A mí nunca se me hubiera pasado por la cabeza buscar a mi madre biológica porque, para mí, mi madre es mi madre. Es superprotectora y delicada, le encanta cuidar a la gente y cocinar. No tiene nada que ver con cómo es sobre el escenario, le pones el micrófono y cambia completamente". Isa también recordó a su madrina, María del Monte, que durante muchos años fue uno de los grandes apoyos de la cantante: "La llamaba Nana. Desde que se fue, la he visto muy pocas veces y siempre ha sido porque yo he ido a buscarla, aunque creo que ya le toca a ella venir a buscarme a mí".
La artista comenzó su carrera gracias a su madre doña Ana, quien sin lugar a dudas marcó y sigue marcando su vida. Isa es consciente de la influencia que ejerce su abuela en la familia y comenta que la educación que le habían dado a Isabel se la han transmitido también a ella: "Si no fuera por mi abuela, mi madre no estaría donde está ahora. Ella hace lo que mi abuela dice, su relación es muy tradicional y la relación que ha tenido conmigo ha sido igual. Creo que mi madre siempre se ha sentido en deuda con todos por ser artista, era la que tenía que sostener a la familia".
Isa también aseguró que su hermano Kiko ha sido siempre, a pesar de los altibajos, como un padre para ella, con el que ha compartido confidencias y a quien siempre ha recurrido para pedirle consejo. Tampoco tuvo reparo en hablar de la mala relación que siempre ha tenido con su tío Agustín Pantoja, con quien "nunca se ha llevado bien". "Yo era más pequeña que mi hermano y no me he sentido igual de querida por ellos, veía cosas y sabía que no nos trataban igual. Me sentía desplazada. A mi madre nunca la he puesto entre la espada y la pared, pero por eso voy a Cantora lo justo y necesario".
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