El diplomático Jaime González Castaño, vocal asesor de Mariano Rajoy, contrajo matrimonio con Loreto Cárceles en una boda celebrada en la Catedral Castrense de Madrid, a la que acudieron más de 200 invitados, prácticamente en su totalidad de la clase política y entre los que destacó la presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con su esposa, Elvira Fernandez, así como el Comisario europeo, Miguel Arias Cañete, o el exalcalde de Madrid José María Álvarez del Manzano, con su esposa, Eulalia Miró.
Mariano Rajoy acudió a la celebración, pero no pudo presenciar la ceremonia religiosa. El Presidente del Gobierno tuvo que viajar a Barcelona para acudir a un acto de su campaña al frente del Partido Popular de cara a las próximas elecciones y horas más tarde asistió a la boda de Jaime González Castaño, su asistente personal y hombre de confianza. El mandatario político estaba invitado al enlace desde hacía un año, pero los últimos acontecimientos en Cataluña tras la consulta del 9-N impidieron a Rajoy posponer este desplazamiento a la Ciudad Condal. En un tiempo exprés, Rajoy consiguió viajar de Barcelona a Madrid para solventar sus compromisos políticos y posteriormente acudir a la boda de su consejero y amigo acompañado por su esposa, Elvira Fernández.
Jaime González, que lució para su gran día el uniforme del cuerpo diplomático, dio el ‘sí, quiero’ a Loreto Cárceles, muy guapa con un diseño sencillo y elegante adornado con un fajín dorado. El día de su boda estuvo marcado por la presencia de una ligera lluvia que incomodó en cierta manera a los novios, pero que en ningún momento les borró la sonrisa. El banquete nupcial tuvo lugar en la preciosa finca Las Jarillas, un espectacular complejo emplazado en el norte de Madrid y adquirido en el siglo XX por el Marqués de Urquijo como residencia de recreo y caza.
Jaime González es un joven diplomático español, con poco más de treinta años, que entró en Moncloa de mano de Jorge Moragas, jefe de gabinete de Mariano Rajoy. Se trata de una persona que goza de la total confianza de la familia Rajoy, ya que incluso está presente en los desplazamientos familiares que hacen en vacaciones; todo ello sin tener ningún nexo de unión con el Partido Popular. Su tarea es la de ayudante del presidente, una especie de asistente personal, organiza su agenda y aconseja al dirigente.
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