¿Te gustaría alojarte en un hotel submarino?

Lujosas suites sobre el agua con suelo transparente, bodas en el fondo del mar y hasta un restaurante y un spa subacuáticos permiten, entre otros placeres, disfrutar de los fondos marinos de algunos de los océanos con más vida del planeta sin tener necesariamente que mojarse ni un pelo.

Hace 22 años, en 1986, abría sus «puertas» el primer hotel subacuático del mundo: el Jules’ Undersea Lodge, en Cayo Largo (Florida), un centro de investigación marina con dos habitaciones para visitantes que, aun sin ser de lujo —la sensación es la de instalarse en un submarino—, cuenta con aire acondicionado, duchas de agua caliente, una cocina dirigida por un gran chef y un pequeño salón desde el que ver los peces de colores que asoman por los ojos de buey. Incluso quienes nunca hayan buceado antes pueden acceder sin dificultad, con ayuda de unos instructores, hasta el interior de este peculiarísimo y espectacular hotel. Allí, las propuestas son tan variadas como insólitas: excursiones muy completas para submarinistas diplomados, para observar la flora y fauna acuáticas, estancias de apenas unas horas para los que no vayan a hacer noche y hasta experiencias tan excéntricas y originales como casarse en el fondo del mar o reservar el lodge en exclusiva para sorprender a su pareja con la luna de miel más impactante y original que jamás nadie hubiera podido imaginar.

Son ya varias las islas-hotel del archipiélago de las Maldivas, en pleno océano Índico, que han sustituido los antaño suelos de impecable teca por los revolucionarios materiales transparentes. Y así despachan en bandeja de plata la opción, mucho más atractiva, de emocionarse ante el avance de una manta raya o de contemplar extasiados unas juguetonas crías de tiburón sin siquiera mojarse, y hasta sin salir de la cama, gracias a los suelos transparentes, pero resistentes y seguros, de algunos de sus bungalós flotantes superexclusivos. El W Retreat & Spa es uno de los hoteles que ofrecen, en su carta exclusiva, suelo de cristal en algunas de sus suites.