Cascadas, piscinas naturales y un monasterio, la ruta más refrescante por el valle del Lozoya
A 100 kilómetros de Madrid, en el valle del río Lozoya, los cartujos encontraron su retiro. En este lugar donde la naturaleza ha sido generosa levantaron el monasterio de El Paular, punto de partida de una ruta que tiene como final celestial las cascadas del Purgatorio. No hay mejor rincón para dar buena cuenta de la belleza que derrocha.
Monasterio del Santa María de El Paular, donde organizar una visita (monasteriodeelpaular.com) antes de iniciar la ruta y detenerse en su imponente claustro ajardinado.
En el legendario puente del Perdón arranca una de las rutas más transitadas por el valle del Lozoya que lleva a las cascadas del Purgatorio.
Subida a las cascadas del Purgatorio. El itinerario discurre entre robledales y vegetación de ribera.
Una excursión apta para realizar en familia especialmente en primavera, cuando el río lleva más caudal de agua y las cascadas están en su máximo explendor, pero puede realizarse en cualquier época del año.
Un conjunto de dos cascadas sucesivas que forman las aguas del arroyo del Aguilón, uno de los más caudalosos afluentes del río Lozoya.
La sierra de Guadarrama (parquenacionalsierraguadarrama.es/es/) ofrece numerosas posibilidades de excursiones a quienes la visitan.