MARAVILLAS DESDE MI PANTALLA / 31
Cualquier visita por Bruselas debe comenzar por su corazón y en Bruselas el corazón de su centro histórico lo ocupa esta animada y monumental plaza adoquinada en la que se respira historia en cada rincón. Fue el escritor Víctor Hugo quien dijo que la Grand Place de Bruselas era la más hermosa del mundo. Una definición a la que se puede añadir que también una de las más notables de Europa. La belleza de este espacio que empezó a tomar forma en el siglo XV con un mercado de abastos y varias casas gremiales, reside en el perfecto conjunto de estilos arquitectónicos que reúne, desde el gótico hasta el barroco, por eso ha sido merecedora del título de Patrimonio de la Humanidad.
SABÍAS QUE…
Una vez cada dos años, desde 1971, la Grand Place de Bruselas se cubre a mediados del mes de agosto con una espectacular alfombra de flores, principalmente begonias, pues Bélgica es el mayor productor de estos bulbos. La confección del tapiz floral requiere del trabajo de un centenar de jardineros.
La Maison du Roi (casa del rey), uno de los edificios de la Grand Place, nunca fue residencia de un monarca. En el siglo XII era un edificio de madera donde se vendía pan, de ahí que siga conservando su nombre en flamenco, broodhuis, que significa casa del pan.
Los pequeños trajes que forman parte del guardarropa del Manneken Pis, otro de los símbolos de Bruselas y también en la lista de la Unesco, se encuentran en la Maison du Roi (el Museo de la Ciudad).
Karl Max iba todos los días al café de la Grand Place para reunirse con Engels y otros jóvenes aspirantes a revolucionarios. El local todavía existe, pero ahora con el nombre del Café del Cisne y convertido en un gran restaurante.
IMPRESCINDIBLES
Visitar el edificio del Ayuntamiento (en la imagen), el más antiguo de la Grand Place, en el que destaca su torre, de 96 metros de altura, rematada con una estatua de San Miguel.
Sentarse a degustar una cerveza belga en el Roy d’Espagne, el bar más famoso de la Grand Place, y observar el ir y venir de turistas y locales desde su terraza.
Admirar la Maison des Ducs de Brabant, un conjunto de edificios neoclásicos con raíz flamenca; Le Pigeon, la vivienda en la que se alojó Víctor Hugo durante su exilio en Bélgica, y visitar la Maison du Roi, que acoge, actualmente, el Museo de la Ciudad en el que se exponen pinturas del siglo XVI y algunos tapices, entre otras muchas joyas.
Aquellos que deseen atraer la buena suerte deben tocar el brazo de la estatua de bronce de Everad’t Serclaes, situada a la izquierda del ayuntamiento.
MUY PRÁCTICO
Para conocer toda la historia de los imponentes edificios que conforman la Grand Place podemos optar por un tour gratuito, como el que ofrece Buendía Tours (buendiatours.com/es/bruselas/free-tour-bruselas)
Para viajar a Bruselas solo es necesario el DNI. Existen vuelos directos Madrid-Bruselas desde 60 €.
Las visitas al Ayuntamiento son bastante limitadas. Solo se puede acceder a él los miércoles y los domingos y existen visitas guiadas, eso sí en inglés.
VISITA VIRTUAL
Para abrir boca, nada como hacer un tour virtual por esta mágica plaza. Para ello puedes entrar en este enlace y disfrutar de la Grand Place y su ambiente: photojpl.com/grandplace-de-bruselas-recorrido-virtual/-/y0ZDscU3Rd/