Como cada año, el pueblo mexicano se alista para celebrar a la Virgen de Guadalupe, el próximo 12 de diciembre, una fecha en la que varios artistas se dan cita en la Basílica para participar en Las Mañanitas, un evento en el que, por tercer año consecutivo, asistirá Lucero Mijares. Orgulloso de ver a su hija formar parte de esta celebración, a la que también acudirá su exesposa Lucero, Manuel Mijares compartió emocionado varias fotos de su hija en La Villa, durante la grabación de su número musical.
Fue en 2023 cuando Lucero Mijares le cantó por primera ocasión a la Virgen Morena, en un dueto con su mamá con quien interpretó Gloria a ti/ Tú serás mi luz. El año pasado, la joven regresó al recinto sagrado para, por primera vez, mostrar su talento con el tema de Juan Gabriel Te lo pido por favor, este 2025, regresa nuevamente en solitario.
A través de su cuenta de Instagram, el papá de la cantante, Mijares, compartió todo un álbum de fotos de su hijo en la Basílica. "No olviden acompañar a mi nena Lucero Mijares a cantarle Las Mañanitas a nuestra morenita", escribió el orgulloso papá de Lucero, quien dio a conocer que la joven formará parte el elenco de la transmisión especial de Las Estrellas.
Una tradición familiar
Para Mijares es muy especial ver a su hija seguir la tradición familiar de cantarle a la Virgen, tal como él y Lucero lo han hecho por años. Para la familia, agradecer a la Guadalupana es una costumbre muy especial que ahora heredan a la nueva generación. "Virgencita, gracias por todo lo que nos das, cuídanos muchísimo, estoy muy emocionada de estar aquí cantándote", dijo el año pasado la joven cantante durante su serenata.
La primera ocasión que Lucero Mijares le cantó a la Virgen fue de la mano de su mamá, quien la guió a la hora de dirigirse a la morenita: "Gracias por darnos tu luz, madre de Dios y de nuestras familias, permite que nuestros hogares mantengamos la unión y la paz en estos tiempos de crisis, cuida de nosotros y líbranos de todo mal. A ti dedicamos nuestro canto y celebramos en tu día", fueron las palabras que Lucero le ofreció a la Virgen, el día en que unió su voz a la de su hija para honrarla.








