Seis años atrás, Juan Soler y Maky pusieron punto final a su matrimonio tras poco más de una década juntos, tiempo en el que formaron una familia integrada por sus hijas Mía y Azul. La presentadora de televisión, quien recientemente celebró la graduación de su primogénita en Miami, aprovechó su actividad en redes sociales para conversar sobre diversos temas, uno de ellos su postura con respecto al divorcio. La argentina se sinceró tras el comentario de un usuario, quien aseguró percibirla con nuevos aires tras concluir su pasada relación con el actor, situación que ella abordó con total respeto para reiterar la importancia del autocuidado más allá de los giros en el aspecto sentimental.
Maky, enfocada en cuidarse
La también actriz abrió su corazón cuando uno de sus seguidores le comentó que la percibía más hermosa desde su divorcio, palabras a las que Maky respondió de manera directa: “Para mí no tiene nada que ver en el momento de tu vida en el que te encuentres, simplemente es una decisión de: ‘Me quiero cuidar, me quiero ocupar un poco más de mí’. Cuando uno tiene hijos más chiquitos es complicado y obviamente estás más cansada, no tienes tanta energía…”, dijo en un clip mientras conducía su automóvil.
Maky ahondó en sus declaraciones y descartó que su separación de Juan Soler haya marcado una diferencia entre su pasada y actual apariencia, pues habló de cómo desde hace varios años ha sido importante para ella el autocuidado. “Yo a los 42 años decidí empezar a hacer ejercicio, nunca había hecho, y eso fue para mí un antes y un después que no tiene tanto que ver con el estado civil, y creo que uno no puede responsabilizar a los demás de cómo está uno. Uno está bien porque uno decide estar bien, eso es muy importante, no dar el control a otras cosas…”.
Enfrentar un divorcio
En su mensaje, Maky también ha sido sincera al reconocer lo complejo de una separación, y cómo estas situaciones de alguna manera repercuten en uno mismo. Sin embargo, priorizar el cuidado personal es importante, como ha sido su caso. “Lo que quiero decir es que no hay excusas para empezar a cuidarse y a sentirse bien con uno mismo, que a veces uno dice: ‘El divorcio le cayó muy bien o el noviazgo o el estar enamorada’. Sí, obviamente, todas esas cosas influyen, pero uno siempre tiene que tratar de estar enfocado en uno…”
Finalmente, Maky abordó el tema de la separación y cómo la familia juega un papel muy importante en estos procesos. “Un divorcio nunca cae bien, al menos que te hayas casado, pero divorciarte no es una opción espectacular que vas a ir a festejar, es un proceso largo, doloroso que hay que pasarlo y hay que seguir adelante, y qué bueno que a veces uno tiene mucha fe y sabe que pueden estar todos los integrantes de la familia mejor, porque de eso se trata y sales adelante y eres feliz…”, expresó.