De las quirúrgicas a las más atrevidas: las 'royals' sorprenden con sus mascarillas
Reyes y príncipes han hecho de esta protección un accesorio de moda
La mascarilla se ha convertido en una protección obligatoria en gran parte del mundo para frenar la expansión del coronavirus. Los miembros de la realeza ya han recuperado sus agendas institucionales al completo y las salidas de Palacio son tan frecuentes como en la era preCOVID. Siguiendo las recomendaciones sanitarias de las autoridades de sus países, todos llevan las mascarilla en sus reuniones, audiencias y en otros muchos compromisos y algunas reinas y princesas han aprovechado para customizar sus protecciones de originales maneras.
A Guillermo y Máxima de Holanda no ha sido demasiado frecuente verles con mascarilla, pero hace unas semanas sorprendían en una recepción con empresarios, que tuvo lugar en el Palacio Noordeinde, donde el monarca y su esposa aparecieron con una mascarilla en color azul con una corona naranja impresionada en uno de sus laterales. Estos son los colores del estandarte real de los Países Bajos y la Reina suele elegirlos para los estilismos de sus citas institucionales más importantes. Simbolizan el Principado de Orange y el condado de Nassau, los territorios originarios de la dinastía reinante que actualmente forman parte de Francia y Alemania. La reina Máxima, muy detallista y gran amante de los complementos, seguro que en el futuro vuelve a sorprender con otra elección
La Familia Real española fue una de las primeras que usó mascarilla en sus compromisos. Admeás de los Reyes, sus hijas, que han tenido un gran protagonismo durante la pandemia, han aparecido con sus bocas tapadas por unas de tipo quirúrgico. Este tipo son las que tanto don Felipe como doña Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía más usan en sus apariciones. En los actos con motivo del 12 de octubre, que este año tuvieron lugar en el Palacio Real, los cuatro aparecieron con el mismo estilo de protección
Durante el verano hemos visto a la Familia Real recorriendo las islas de Baleares e interesándose por la situacion del turismo en esa región. En esas salidas los Reyes y sus hijas han lucido mascarillas quirúrgicas, pero un mes antes, los cuatro decidieron llevar unas de color negro durante el homenaje de Estado a las víctimas del coronavirus, que tuvo lugar el pasado 16 de julio en la Plaza de la Armería del Palacio Real y que contó con representantes de todo el arco parlamentario, de las instituciones públicas y europeas, así como las familias y amigos de los fallecidos por la COVID. Dada la solemnidad y el recuerdo a las víctimas, los Reyes, la Princesa y la Infanta lucieron mascarillas de luto, al igual que la ropa que eligieron: en tonos negros y azul marino
Aunque doña Letizia siempre suele llevar mascarilla quirúrgica, solo la ha cambiado por una tipo KN95 durante la apertura del curso escolar en Navarra, la Reina sorprendió a principios de octubre al lucir por primera vez una protección corporativa. Fue en una reunión en la sede madrileña de la Cruz Roja donde la madre de Leonor y Sofía apareció con una mascarilla roja con el logo de la entidad. Siempre que visita esta institución, doña Letizia se siente como una más y por eso no duda en ponerse las prendas que identifican a sus voluntarios. Así, el pasado 11 de mayo, cuando el país todavía estaba bajo el estado de alarma, acudió a uno de los centros de Madrid de esta ONG donde se puso el característico chaleco rojo y estuvo conociendo de cerca la labor de estos trabajadores
Una de las primeras en lucir las mascarillas a juego con su ropa fue Matilde de Bélgica. Dentro de los looks de la nueva normalidad, la Reina apareció con su imagen más rompedora el pasado de septiembre. En esa ocasión, la esposa del rey Felipe acompañó al soberano de los belgas al tradicional concierto Für Jan van Eyck en la catedral de Gante donde impactó con unos pantalones de lentejuelas transaparentes y una protección en la cara hecha de la misma tela. Matilde de los belgas se ha convertido en todo un referente a la hora de combinar seguridad y estilo
A juego con sus vestidos o estampadas, las mascarillas de Matilde siempre son de lo más glamurosas y no duda en arriesgar con ellas. La de la imagen corresponde a una visita real a la Casa de Historia Europea, que tuvo lugar el pasado septiembre en Bruselas
Guillermo y Stéphanie de Luxemburgo bautizaron a su hijo el pasado 19 de septiembre en la Abadía de Clervaux. Aunque en gran parte de la ceremonia, los felices padres estuvieron sin mascarilla, sí que llegaron al lugar con ellas puestas. Siempre fiel a su estilo clásico, la gran duquesa heredera eligió una proteccion facial en color blanco. Además de los emocionados padres, con el pequeño estuvieron el Gran Duque y la Gran Duquesa; el príncipe Félix y la princesa Claire, con sus hijos Amalia y Liam; el príncipe Louis y el príncipe Sebastián, además de algunos miembros de la familia Lannoy, a la que pertenece su madre
Hasta la fecha, Charlene de Mónaco ha llevado una de las mascarillas más originales de la realeza. A finales de agosto, la Princesa acudió hasta Niza (Francia) para presenciar, junto con su marido, el príncipe Alberto, la primera etapa del Tour de Francia. Perfectamente combinada con una moderna chaqueta de cuero amarilla, la exnadadora olímpica eligió una mascarilla con guiño al Joker. En la misma se podía leer la frase Why so serious? (¿Por qué estás tan serio?), una mítica expresión del famoso villano, que parece que ha conquistado a Charlene. El matrimonio fue el encargado de amadrinar la salida de esta famosa carrera de ciclismo, que también ha sido de lo más atípica
Aunque los miembros de la Familia Real británica no están apareciendo con mascarilla en algunos de los actos públicos que tienen, la duquesa de Cambridge lució la primera protección en su cara el pasado agosto. Entonces, la esposa del príncipe Guillermo eligió un diseño reutilizable de algodón de Amaia Kids con estampado Liberty llamado Wiltshire Floral. La Duquesa acudió con ella a la organización benéfica Baby Basic UK en Sheffield, donde se conmovió hasta las lágrimas al conocer las historias familiares en las que faltan recursos cuando llega un bebé
El mismo estilo de mascarilla llevó Kate Middleton un mes después en el Beigel Bake, un establecimiento que abrió sus puertas por primera vezz en 1974 y desde entonces ofrece sus famosos bagels, donde junto a su marido, el príncipe Guillermo, hizo de panadera por un día. Allí se interesaron de cómo el local se adaptó a la cuarentena, acortando horarios pero colaborando con aquellos que necesitaban comida. Ese día, la duquesa de Cambridge también eligió una mascarilla de tela con estampado floral Liberty
A Beatriz de York se la ha visto en multitud de ocasiones con mascarilla. Aunque quizá optó por una de las más originales cuando acudió, dos meses después de su boda a ver su vestido de novia, que se ha expuesto al público en el Castillo de Windsor. La hija del príncipe Andrés y Sarah Ferguson eligió un diseño con original estamapado para posar con su vestido de novia, un diseño vintage que perteneció a su abuela, Isabel II y que creó Norman Hartnell. Además del vestido, la Princesa también cedió para la exposición sus zapatos de Valentino y una réplica de su ramo de novia rosa y blanco de Patrice Van Helden Oakes, ya que el original, como manda la tradición, fue colocado a modo de ofrenda sobre la tumba del Soldado Desconocido de la Abadía de Westminster
La duquesa de Cornualles os otro de los miembros de la realeza que más ha customizado sus mascarillas, casi siempre de tela y a juego con su ropa o acorde con el acto en el que participe. Este ha sido el caso de su reciente aparición en el Campo del Recuerdo en la Abadía de Westminster, donde la esposa de Carlos de Inglaterra apareció con una protección sobre su cara con estampado de amapolas. Esta flor se ha converitdo en el emblema del Día del Recuerdo, también conocido como Día de la Amapola, Día del Armisticio o el Día de los Vetarnos, en los países de la Commonwealth con la que se queire recordar los sacrificios de los miembros de las Fuerzas Armadas y de los civiles en tiempos de guerra, especialmente desde la Primera Guerra Mundial. En esos actos en memoria de los caídos, los miembros de la Familia Real británica suelen aparecer con broches de amapolas sobre sus solapas
La nuera de Isabel II siempre demuestra que en muchas ocasiones va un paso más allá. Por eso el pasado septiembre decidió cambiar la mascarilla por una pantalla transparente para que la gente la pudiera ver sonreír. La lució en su visita a un centro de entrenamiento de perros de detección médica, que han sido entrenados para detectar el COVID-19. Allí comentó que se la puso para que se la viera su sonrisa, aunque lo cierto es que desde entonces no la ha vuelto a llevar