Aiko de Japón, la princesa sin trono, ya es mayor de edad
La hija del emperador Naruhito cumple este domingo 18 años y se une así a un club del que ya forma parte Elisabeth de Bélgica
La princesa Aiko, hija del emperador Naruhito y de Masako de Japón, nació en el año 2001 en una cuna de oro. Gracias a la multitud de imágenes que existen de ella, la hemos podido ver crecer. Nieta de Akihito y Masako, fue educada para representar al Imperio del Sol Naciente.
Sin embargo, la férrea ley sálica únicamente permite a los hombres ocupar la línea sucesoria en un país en el que la tradición se cumple escrupulosamente, por lo que Aiko se tendrá que conformar con ser una princesa sin trono
Tras su llegada al mundo, se desató una auténtica oleada de peticiones para que la norma fuera revisada y de esta forma se tuviera en cuenta la posibilidad de que Japón tuviera una emperatriz nipona por primera vez en más de 230 años. La última reinante, Go-Sakuramachi, fue la décima a lo largo de los casi 1.500 años de historia del Trono de Crisantemo
Como manda la tradición, Aiko estuvo hasta siete días sin nombre y, posteriormente, sus padres cumplieron a rajatabla con la norma no escrita que estima la terminación 'hito' para los niños y 'ko' para las niñas. La familia imperial también respetó las costumbres legendarias de celebrar la ceremonia de la espada de la protección, del baño de la fertilidad y del vestido con el sello imperial
Pese a todos estos intentos, años después el Gobierno japonés cerró el camino definitivamente a la princesa y las miradas se posaron entonces sobre su primo Hisahito, actual heredero imperial. A lo largo de estos 18 años de vida de Aiko hemos sido testigos de muchas 'primeras veces'
Hemos visto us primeras clases de esquí, su debut en la escuela primaria y su posterior graduación, su participación en numerosas actividades escolares, musicales y deportivas -en ocasiones con triunfos incluidos-, sus inicios en la etapa de secundaria en la prestigiosa escuela Gakushuin y su marcha al extranjero, entre otras cosas
Cabe recordar que el año pasado decidió seguir los pasos de los príncipes Guillermo y Harry de Inglaterra y estudió durante un verano en el exclusivo colegio Eton, cerca del Castillo de Windsor. Años después volvieron a resurgir con fuerza las voces que pedían al Ejecutivo una igualdad entre príncipes y princesas y, por tanto, una revisión y posterior modificación de las leyes de la Casa Imperial
Sin embargo, meses antes de que Naruhito, padre de Aiko de Japón, se convirtiera en el nuevo emperador, el Gobierno nipón decidió retrasar esta decisión sobre el futuro de las mujeres que pertenecen a la primera familia del país hasta que el nuevo emperador ocupara el Trono del Crisantemo
En cualquier caso, y tal y como avanzaron los medios japoneses entonces, es muy difícil lograr un consenso sobre este controvertido tema, por lo que todo apunta a que, de manera definitiva, la princesa Aiko únicamente gozará de la distinción de ser la hija del emperador, pero no será emperatriz en un futuro
Mientras tanto, ella sigue disfrutando de sus hobbies y aplicándose para completar su formación. Pocos saben que entre sus aficiones se encuentra la música, los animales -casi siempre ha tenido perros en casa-, la pintura, la poesía, la lectura, los deportes y la astrología, una de sus grandes pasiones
Aiko de Japón se suma, desde este domingo, a una lista de la que ya forma parte Elisabeth de Bélgica, la primera princesa en alcanzar la mayoría de edad. Lo hizo el pasado 25 de octubre y festejó sus 18 años con una gran celebración en palacio
Este año, su padre Naruhito fue proclamado emperador en un gran ceremonial, sucediendo así a Akihito. El siguiente en la línea de sucesión es el hermano del emperador y el hijo de este, Hisahito, primo de Aiko y heredero al Trono del Crisantemo
Pese a todo, la princesa Aiko está siguiendo los pasos de su padre, el primer príncipe heredero al trono nipón, al recibir una educación internacional. Naruhito se formó en el palacio, bajo los estrictos preceptos que están estipulados para su título, pero cuando cumplió la mayoría de edad comenzó a recorrer el mundo, llegando a alojarse en casa de una familia en Australia