Este viernes, 31 de agosto, todas las miradas están puestas en Rania de Jordania, que cumple 48 años. La esposa del rey Abdalá es una mujer de su tiempo, conectada al mundo real a través de las nuevas tecnologías y muy comprometida con los problemas que afectan al mundo árabe. Rania es todo un referente en la defensa de los más desfavorecidos y en este último año se ha dedicado en cuerpo y alma a ellos. También se ha volcado en el cuidado de su familia, celebrando fechas tan señaladas como sus bodas de plata o la graduación de su hija Salma. 365 días repletos de compromisos que resumimos en estas imágenes.
La soberana celebrará este viernes su cumpleaños en la más estricta intimidad. No se esperan grandes fastos para la ocasión, pero ella tiene muchos motivos para celebrarlo por todo lo alto y el principal es saber que ha realizado un magnífico trabajo al frente de las diferentes organizaciones humanitarias que preside. Formada en administración de empresas en la Universidad Americana de El Cairo y con experiencia en mercadotecnia adquirida en las sedes de Citigroup y Apple en Amán, Rania (Kuwait, 1970) se casó a los 22 años con el rey Abdalá, con quien posa en esta foto. Una imagen que la soberana compartió en su perfil de Instagram el pasado 10 de junio con motivo de sus bodas de plata. “Muy agradecida por cada día que paso a tu lado. Feliz aniversario”, escribió. Para una ocasión tan especial, apostó por una creación de Hiba Zahgloul, una diseñadora de Ramala, Cisjordania, afincada en Estados Unidos.
"Todos crecen pero tú nunca serás lo suficientemente mayor en mi corazón… Increíblemente orgullosa de ti, hoy y siempre”. Estas fueron las palabras que Rania de Jordania le dedicó a su hija Salma el pasado mes de mayo con motivo de su graduación en la Academia Internacional de Amán. La princesa Salma vivió la celebración en familia, tal y como mostró la Reina en sus redes sociales, pero con una significativa ausencia, la de su hermana mayor, la princesa Iman, que estaba estudiando en la Universidad de Georgetown, Estados Unidos.
En septiembre de 2017, los reyes de Jordania inauguraron el nuevo edificio del Centro Oncológico Rey Hussein de Ammán. "La apertura de esta nueva expansión es un paso adelante para la asistencia sanitaria en Jordania. ¡Gracias a todos los involucrados!", publicó Rania en Twitter tras la visita. El centro ha duplicado su capacidad, pasando de 173 camas a 352, además de haber incorporado la última tecnología en la detención y tratamiento contra el cáncer. Durante el recorrido, los soberanos charlaron con algunos pacientes y visitaron la sala de juegos dedicada a los niños.
En octubre de 2017, Rania viajó a Bangladés con UNICEF para luchar por los derechos de los Rohinyá, el pueblo más perseguido del mundo. "Sin respeto o cuidado por los principios de la ley humanitaria e internacional, la discriminación y persecución de la minoría Rohinyá no ha cesado. Uno tiene que preguntarse, ¿por qué las dificultades de este grupo minoritario están siendo ignoradas?", aseguró en el discurso que dio en el campamento de refugiados de Kutupalong. "Antes de venir me había preparado para ser testigo de condiciones desesperadas, pero las historias que he oído hoy han sido desgrarradoras y descorazonadoras", señaló. "Urjo a las Naciones Unidas y la comunidad internacional a hacer todo lo que puedan hacer para parar el sufrimiento y la violencia que están cometiendo contra los musulmanes Rohinyá, no porque sea nuestro trabajo hacerlo, sino porque es lo que la justicia demanda", pidió.
Rania se mostró "conmocionada" por la "desgarradora" situación de los rohinyás, tras viajar directamente desde Jordania para realizar una breve visita a los campos de refugiados en el distrito de Cox's Bazar, en el sureste de Bangladesh. Allí escuchó los "desgarradores" relatos sobre "menores dejados huérfanos, mujeres víctimas de violencia y pueblos quemados hasta los cimientos", historias que, pese a haberse preparado para escuchar antes de viajar, confesó, le causaron una fuerte impresión. La reina jordana visitó un centro de salud y una escuela gestionadas por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y un centro de aprendizaje gestionado por Unicef, entre otros, así como varios campamentos improvisados.
En octubre de 2017, Rania también visitó a los habitantes de Al-Bayoudha para conocer de primera mano los proyectos de desarrollo comunitario de la aldea. La soberana siempre ha elogiado los avances de sus compatriotas jordanos y su capacidad para aprovechar al máximo los recursos naturales de la región y crear productos que sustenten la economía local. Entre los productos que le mostraron se encontraban jabones, bordados y aceite de oliva elaborado por las mujeres de la localidad. La soberana transmitió un mensaje de su esposo a los lugareños. "Su Majestad anima a que cada zona aproveche al máximo sus características distintivas para intentar un desarrollo sostenible y esta aldea debería estar orgullosa de lo que ha logrado", dijo.
La soberana continúa incansable con su labor social en la que prima, sobre todo, la educación. Lucha para que los niños y niñas de su país, que el día de mañana se convertirán en los hombres y mujeres de Jordania, tengan acceso a una educación de primera calidad. Además, en los últimos años ha intentado mejorar la calidad de las familias jordanas y promover el diálogo interreligioso entre las diferentes religiones y tradiciones espirituales para fomentar una mayor comprensión y tolerancia en todo el mundo. También ha trabajado para abrir las fronteras de su país a los jóvenes emprendedores para que puedan competir a nivel mundial. Esta imagen fue tomada a principios de 2018, durante la visita sorpresa de Rania al parque empresarial Rey Hussein, en Amán. "Los jóvenes emprendedores de Jordania no dejan de sorprenderme con sus ambiciosas iniciativas", publicó en sus redes sociales.
El compromiso de Rania por la educación la llevó el pasado mes de febrero a la ciudad de Jerash, ubicada a 50 kilómetros de Amán, para conocer más detalles sobre el proyecto educativo I learn, cuyo objetivo es establecer espacios seguros de aprendizaje para los niños jordanos que promuevan la innovación, el desarrollo intelectual y el pensamiento crítico. La soberana compartió su visita en las redes sociales con esta imagen en las que se observa el patrimonio de una de las ciudades romanas más importantes y mejor conservadas del Próximo Oriente.
Convencida de que la educación es el único motor de cambio, la Reina apuesta por la formación de docentes cualificados a través de la Academia de Profesores Reina Rania de la Universidad de Jordania. Una iniciativa que promueve sin descanso en sus redes sociales, donde tiene numerosos seguidores. Pionera en todos los sentidos, abrió su cuenta de Twitter en abril de 2009 y en Instagram suma 4,7 millones de seguidores. No solo fue la primera en lanzarse a las redes sociales, sino que sigue día a día aprendiendo sobre ellas, adaptándose a los cambios y creando escuela.
Abdalá II y Rania de Jordania llegaron el pasado 20 de marzo a los Países Bajos para una visita de estado de dos días que, según calificó la corte holandesa, es una muestra de la buena relación entre países. El plato fuerte de este compromiso fue la cena de gala en el Palacio Noordeinde, momento al que pertenece esta imagen. Consciente de que sus pasos por Europa son seguidos al milímetro, Rania no dudó en acudir a su cita con Guillemo y Máxima de Holanda con un vestido con patrones y adornos de estilo jordano que fue un regalo de las mujeres de la asociación Basmet Al-Khair, una iniciativa que aúna varios proyectos de las familias menos privilegiadas de Gobernación de Balqa' al noreste de Amán. La propia Rania explicó la procedencia del vestido y agradeció el regalo a través de sus redes sociales, haciendo que en pocas horas Oriente y Occidente hablaran de este proyecto poco conocido para muchos hasta ahora.
Rania de Jordania junto a su marido y su hijo Hussein, el príncipe heredero. La imagen corresponde a la reunión anual del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD), que tuvo lugar el pasado mayo en el Mar Muerto. La soberana dio un importante discurso durante la celebración de dicho encuentro, al que asistieron numerosas autoridades financieras, políticas y empresariales de todo el mundo.
La Reina no es sólo un referente a nivel mundial por su trabajo en ayuda a los demás, sino también por su belleza y estilo y por eso, suele figurar siempre en las listas de las mujeres más elegantes del planeta. Prueba de ello es esta imagen de la visita al centro infantil Queen Rania Family, de Jabal Nassar, un barrio ubicado al este de Amán, donde, con una sonrisa y tan cercana como siempre con los niños, volvió a destacar por su sorprendente estilismo. Nunca antes la soberana jordana había apostado por un 'look' tan deportivo para ir al trabajo y su elección no pasó desapercibida para la prensa internacional.