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Esta vez se ha hecho una excepción y la soberana británica no ha entrado por la puerta principal, ha elegido una puerta lateral con el fin de acortar su recorrido a pie

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La presencia de la soberana británica en esta misa ha sido una incógnita hasta el último momento debido a unos problemas de movilidad que arrastra desde el pasado otoño y que se vieron agravados a raíz de contraer el COVID-19 el pasado febrero

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Isabel II ha llegado en coche junto a su hijo, el príncipe Andrés

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Isabel II llegando del brazo de su hijo, el príncipe Andrés

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Isabel II ha querido llegar a pie a una cita con casi 2.000 invitados y retransmitida en directo por la televisión británica

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Con este gesto, Isabel II le ha dado una presencia a su hijo Andrés que nadie esperaba, un símbolo de que se apoyan mutuamente y de que el servicio religioso de hoy para la soberana ha sido un asunto familiar

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